La mayoría de los hospitales han sido categorizados en alto riesgo por parte del Ministerio de Salud
Redacción laboral
La situación de la salud en el departamento del Valle es crítica, sobre todo en los centros de salud públicos de mediana y alta complejidad. El riesgo es financiero y está agravado por la deuda de las EPS. Casi todos los hospitales oficiales se enfrentan a un déficit demasiado difícil de superar.
El del Hospital de Buenaventura está en el orden de los 14 mil millones de pesos y el del Hospital Mario Correa Rengifo en Cali bordea esa cifra. Adicionales están las deudas de pasivos y la iliquidez por la que atraviesan. En consecuencia, ha habido demoras en el pago de los salarios; hay trabajadores a los que se les debe desde septiembre y a otros no les han pagado las primas de diciembre.
“Tuve una reunión con un funcionario del Ministerio de Salud, quien me comentaba que es muy difícil salvar la situación, porque a hospitales como el de Buenaventura se les ha invertido mucho dinero en reestructuraciones y en reorganización, y realmente eso no ha dado resultado. Entonces, el Ministerio ha planteado que la única salida es la liquidación”, indicó Jorge Torres Calimeño, presidente de Anthoc Valle del Cauca.
Movilizaciones
Anthoc Valle defiende a los hospitales como entes públicos, porque es un servicio que la comunidad necesita, y en manos del capital privado la prestación de este servicio es mucho más complicada. La organización sindical espera, en conjunto con la comunidad y con los entes territoriales, defender la red pública hospitalaria de ese departamento.
Efectivamente, desde que se conoció sobre esta situación, la subdirectiva de Anthoc ha realizado múltiples acciones de movilización. El primero de noviembre del año pasado se llevó a cabo un plantón en la gobernación. Luego, el 28 de noviembre se realizaron actividades como bloqueos simultáneos en varios municipios del Valle; en Cali, los trabajadores del Hospital Universitario bloquearon la importante calle Quinta; en Buenaventura, realizaron una marcha y el bloqueo del puente El Piñal; lo mismo sucedió en Tulúa y Roldanillo.
“Eso sirvió para que el secretario de Salud departamental se preocupara, llamara a los gerentes de hospitales y les increpara para decirles que ellos estaban con Anthoc, ayudando en las marchas. Frente a esto surgieron planes de mejoramiento que no han sido claros en sus mecanismos. Nosotros estamos prestos a seguir defendiendo lo público, lo social y los derechos de la comunidad”, comenta Jorge Torres Calimeño.
De otra parte, Anthoc Valle del Cauca denunció que los gerentes de los hospitales están a favor de la tercerización, porque se niegan a recurrir a las sentencias de la Corte para acabar este flagelo.
