La votación se desarrolló en medio de repetidos intentos de las Fuerzas Armadas de Ucrania de sabotear el proceso electoral con ataques de artillería lanzados contra provincias fronterizas, misiones de sabotaje a través de la frontera y el envío de drones cargados de explosivos
Ricardo Arenales
El presidente Vladimir Putin alcanzó una significativa victoria política en las elecciones de este mes de marzo en Rusia, asegurándose un nuevo mandato de seis años, que lo mantendrá en la presidencia hasta 2030. De acuerdo con la Constitución rusa, Putin deberá posesionarse, para el nuevo período de seis años, el próximo 7 de mayo.
Putin inició su gestión como gobernante de Rusia en el año 2000. Una reforma constitucional reciente le permitió postularse para dos nuevos períodos, el actual y uno más, con lo que gobernará la nación euroasiática hasta el año 2036. De esta manera, superaría el período de José Stalin y se convertirá en el mandatario que más tiempo ha estado en el poder desde la era soviética.
A las nueve de la noche, del pasado domingo 17 de marzo, se cerraron las urnas tras una jornada electoral de tres días, inédita en esa nación, en la que fueron acreditadas 112.3 millones de ciudadanos, y 4.9 millones más de residentes en el exterior.
En tiempo récord, la Comisión Electoral Central de Rusia difundió esa misma noche un resultado global del recuento de papeletas en las que se contabilizó el 95.4 por ciento de las mesas de votación con un resultado del 87.32 por ciento de los votos para el actual mandatario.
Los comunistas, segunda fuerza
En segundo lugar, se colocó el candidato del Partido Comunista de la Federación Rusa, Nikolái Jaritónov, con el 4.28 por ciento de los sufragantes; Vladislav Davankov, del partido Gente Nueva en el tercer lugar, con el 3.85 por ciento de las papeletas y, en último lugar, Leonid Slutski, del Partido Liberal-Demócrata de Rusia, con el 3.16 por ciento.
Las autoridades electorales, en el balance de la jornada, destacaron el hecho de que la votación se desarrolló en medio de repetidos intentos de las Fuerzas Armadas de Ucrania de sabotear el proceso electoral con ataques de artillería lanzados contra provincias fronterizas, misiones de sabotaje a través de la frontera y el envío de drones cargados de explosivos.
El mismo domingo de cierre se produjo un ataque masivo ucraniano contra la ciudad rusa de Bélgorov que causó la muerte de una persona, heridas a otras once y daños en decenas de viviendas. La cancillería rusa denunció, por su parte, que el comportamiento de algunos diplomáticos británicos llegó al nivel de gamberrismo, en un intento por interferir en las justas presidenciales.
El jefe de la empresa rusa de telecomunicaciones Rostelecom, Mijaíl Oseevski, dijo a su turno que las elecciones presidenciales en Rusia se celebraron en un contexto de “guerra cibernética”, con ataques dirigidos a todos los recursos: de la Comisión Electoral Central, del Gobierno de la ciudad de Moscú y de todos los proveedores de servicios para la realización de la jornada en las urnas.
La voluntad del pueblo
Una vez conocidos los resultados electorales, Putin, en una alocución televisiva, agradeció la confianza de los electores. “Me complace estar con mis aliados y personas de ideas afines en esta velada”, dijo el mandatario. Dio las gracias a todos los ciudadanos que votaron en estas elecciones y expresó que “la fuente de poder” del país es el pueblo. “Todos somos un equipo”, agregó.
Según Putin, nunca será posible alterar la voluntad de los ciudadanos rusos desde el exterior, y precisó que los votos de los ciudadanos de esa nación conforman la “voluntad unificada” del pueblo. Dijo también que se dan las condiciones para seguir avanzando y hacer que Rusia sea “más fuerte, más poderosa, más eficiente”.
Entre las voces que, al finalizar la semana, se escucharon en Moscú para celebrar el resultado de las elecciones, algunas agregaron un tono de ironía, precisamente alrededor de los intentos injerencistas de algunas potencias extranjeras o de sus aliados.
Intentos de sabotaje
Ella Pamfilova, jefa de la Comisión Electoral Central de Rusia, dijo que “agradece” a Occidente, que con su campaña macartista logró unir a los ciudadanos rusos, ante las crecientes presiones, las sanciones económicas y la retórica agresiva de sus gobiernos contra la nación euroasiática.
Dijo la funcionaria que la alta participación ciudadana se debió al hecho de que los comicios se llevaron a cabo durante tres días y se contó con la posibilidad de ejercer el derecho al sufragio por Internet. Asimismo, sostuvo que también se debe a la presión ejercida por los países occidentales. “El pueblo de Rusia no tolera presiones ni dentro ni fuera del país”, puntualizó.
Ampliando su valoración en este sentido, dijo Pamfilova que el sistema de voto electrónico por Internet fue sometido a un número de ataques “sin precedentes”. Reveló que se registraron más de doce millones de ciberataques contra los recursos de la Comisión Electoral Central, desde el inicio de la campaña presidencial. “Eso es 150 veces más de lo habitual”, indicó la funcionaria.
Popularidad de Putin
“El grado de influencia agresiva desde el exterior no tiene precedentes. Nunca habíamos experimentado algo así. Siempre hay interferencia externa, en todas las elecciones, estamos acostumbrados a ella, es una cuestión permanente. Pero el grado de interferencia externa en las elecciones esta vez, con el deseo de perturbarlas y desacreditarlas, no tiene precedentes”, precisó.
Una mirada comparativa de la popularidad de Putin se puede ver en las encuestas, antes y después de la intervención militar rusa en Ucrania. Antes de la llamada Operación especial, Putin tenía un margen de popularidad del sesenta por ciento aproximadamente. Después de la intervención en Ucrania, esa popularidad se disparó hasta el ochenta por ciento de aceptación.
De ahí que la votación récord por el líder ruso haya sido efecto también del llamado discurso a la nación, del 29 de febrero, en que Putin puso la guerra en Ucrania, y lo que considera “amenazas” de Occidente en el centro de su discurso. Advirtió que un envío de tropas de la OTAN a Ucrania, como sugirió el jefe de Estado francés, traería consecuencias “trágicas”. El mandatario dijo, además, que reforzará con tropas del Ejército las fronteras con Suecia y Finlandia.
Putin es un verdadero estadista como ninguno. Cada dia Rusia es más poderosa y grande