Fue concedido el Premio Nobel de Paz a la iraní Narges Mohammadi, por la defensa de los derechos humanos y su lucha contra la opresión de las mujeres en el país persa. Sin embargo, el galardón ha traído querellas, puesto que la activista se encuentra en prisión. Teherán protesta enérgicamente
Valentina Bolaño Senior
@Vale_BoSe
El viernes 6 de octubre el Comité Noruego del Nobel, dio a conocer su decisión de galardonar a Narges Mohammadi con el Premio Nobel de Paz por la defensa de los derechos humanos y su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán.
Narges Mohammadi es iraní, feminista, defensora de los derechos humanos y periodista. Desde enero del 2022 está presa en Teherán, con una condena de ocho años y 70 latigazos por acciones contra la seguridad nacional y violaciones de las leyes. La resolución desató la polémica en Irán, quien identificó que se trataba de una decisión sesgada y política.
La decisión del Nobel
Tras un año de marchas feministas en Irán, el Comité del Nobel galardonó a Narges Mohammadi por su “valiente lucha”. Según la organización la ganadora del Nobel “ha tenido enormes costos personales. El régimen iraní la arrestó 13 veces, la condenó cinco veces y la sentenció a un total de 31 años de prisión y 154 latigazos. Mohammadi sigue en prisión”.
La decisión se toma tras un año del comienzo de las protestas de mujeres en contra del asesinato de una joven de 22 años en manos de la policía iraní por no llevar el Hiyab. Diversos frentes feministas tomaron la decisión de protestar, proceso que se considera va en favor de las luchas feministas en Oriente Próximo.
Como defensora de los derechos humanos en Irán, Mohammadi no solo ha estado en contra del uso del Hiyab obligatorio, sino que también ha denunciado malos tratos sistémicos en contra de las jóvenes mujeres que hoy se encuentran presas por su activismo.
Reacciones en Teherán
En Teherán se recibió la decisión del Nobel de Paz con frialdad, puesto que Mohammadi está presa desde el 2022 por acciones contra la “seguridad nacional”.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán confirmó que “la decisión del Comité del Nobel de la Paz es un acto político en línea con la política intervencionista y antiiraní de algunos gobiernos europeos”, asimismo, el gobierno manifestó que el premio a Mohammadi es otra manera de represión por parte de Occidente.
Para Teherán el Nobel de Paz debió ser concedido a Qasem Soleimani, el teniente asesinado por orden de Estados Unidos en 2020. El canciller iraní Hosein Amir Abdolahian comentó a través de la red social X que, “el símbolo más digno de la paz mundial fue el abnegado general que luchó contra el terrorismo y los criminales más violentos durante dos décadas y garantizó la seguridad de la región y del mundo”.
La traición a su país apoyando las sanciones contra Irán, han hecho que el gobierno iraní no esté satisfecho con la decisión tomada por el jurado del Nobel y la polémica siga creciendo, pues “el premio de paz se ha vuelto un premio político para apoyar a Occidente”.