El Congreso aprobó el Proyecto de Ley N°242 de 2022, que reconoce a las buscadoras de víctimas de desaparición forzada en la construcción de la paz en el país y la protección de sus derechos
Valentina Bolaño Senior
@Vale_BoSe
“¡Que nos los devuelvan vivos, porque vivos se los llevaron!” se escuchó en el Congreso el 4 de abril; eran las voces de las buscadoras de la Fundación Nydia Erika Bautista después de la aprobación del Proyecto de Ley N°242 de 2022, que otorga reconocimiento a las buscadoras como sujetos políticos que aportan a la construcción de la paz en el país, asimismo, tiene como objetivo la protección integral a los derechos de las mujeres y personas buscadoras de víctimas de desaparición forzada.
“Ese grito nos ha costado violencia sexual, secuestro, privaciones de la libertad; nos ha costado la vida a las mujeres cuando vamos a preguntar a los actores armados dónde están nuestros seres queridos”, dice Yaneth Bautista, con voz fuerte y la mano arriba con el retrato de su hermana desaparecida, Nydia Erika.
En la tarea de la búsqueda de sus seres queridos, ellas mismas han sido víctimas de violencias hacia su integridad física, también se suma la revictimización de la sociedad y de las instituciones, pues las pocas medidas de reconocimiento, protección y el poco acceso a la verdad en los casos de sus familiares desaparecidos, hicieron urgente una propuesta de ley que proteja a las buscadoras.
La Fundación
El proyecto lo llevó la bancada del Pacto Histórico y la Fundación para los Derechos Humanos “Nydia Erika Bautista”, organización originada en el exilio después de que la familia Bautista tuvo que abandonar el país por amenazas en 1997, por su labor en contra de las desapariciones en el país y, en particular, por la desaparición de Nydia Erika Bautista, militante del Movimiento 19 de Abril, M19, y quien se dedicaba al trabajo político en Bogotá y Cali.
La Fundación busca a más de 210.000 desaparecidos en el territorio nacional.
Las violencias de género
Uno de los focos centrales del proyecto es la perspectiva de género “por primera vez estamos haciendo historia para nosotras, porque nunca nos habíamos mirado, siempre vimos hacia los desaparecidos”, declara Bautista.
En el marco del conflicto armado y la violencia sociopolítica en el país, la situación de las mujeres desaparecidas y las buscadoras es crítica, pues son vulnerables a violencia sexual y violencias que atentan contra su integridad física y moral “en un contexto de profunda indolencia, impunidad y discriminación histórica expresada en los casos de las mujeres que se llevaron y en el trato a los derechos de las que se quedaron luchando por la verdad, la justicia y por el regreso de sus seres queridas”, expresa la Fundación Nydia Erika.
Rostro de mujer
En esta búsqueda también hay hombres, sin embargo, desde hace más de 40 años las mujeres son las principales en la labor, según los estudios de la Fundación Nydia Erika Bautista, el 95 por ciento de los casos son las mujeres quienes asumen la búsqueda de los desaparecidos.
Por tal razón, la Comisión de la Verdad en el Informe Final concluyó que “en las familias, la ausencia repentina de los hombres provocó cambios que las obligó a reorganizarse”, el vacío de los hombres, que en muchos casos eran proveedores del hogar, hicieron que las mujeres asumieran abruptamente las funciones de esa persona.
“La lucha de las buscadoras de personas desaparecidas es una lucha solitaria, incansable, absolutamente digna. Son mujeres que han tenido que pasar muchas veces de sus hogares a hacer litigios en instancias nacionales e internacionales, mujeres que llevan un duelo suspendido durante años, y han sufrido afectaciones físicas, mentales, económicas y una revictimización constante”, expresó la senadora María José Pizarro.
La impunidad
Según la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, UBPD, el conflicto armado ha dejado más de 100.000 personas desaparecidas, de las cuales el 99 por ciento está en total impunidad.
Conforme a la Fiscalía General de la Nación, hasta el 2021 se adelantaban 136.344 procesos judiciales, de esos, el uno por ciento tiene sentencia, el 0,9 por ciento está en etapa de juicio y el 0,42 por ciento en ejecución de penas.
Uno de estos casos, con 42 años de impunidad, ha sido el Caso Colectivo 82, donde 13 jóvenes en Bogotá y sus alrededores, la mayoría de ellos estudiantes de la Universidad Nacional, fueron detenidos y desaparecidos por la falsa acusación de haber asesinado a los hijos de Jader Álvarez. La retención ilegal y tortura se dio en el marco de una investigación de la División de Investigación, Policía Judicial y Estadística Criminal, Dipec F2.
Teresa Sanjuán, hermana de Alfredo y Humberto, los primeros que pintaron el Che Guevara en la Universidad Nacional, lleva en la lucha de su búsqueda más de 40 años. Tomó la noticia, de la aprobación del proyecto de ley, con felicidad por Yaneth Bautista y la Fundación “esto es un logro para la Fundación Nydia Erika Bautista, porque siempre han estado buscando la verdad, la justicia y la no repetición. Y esto nos cobija a todas que tenemos el propósito”, respondió a VOZ.
La implementación
“En todo el trayecto que llevamos de la lucha de la búsqueda de nuestros seres queridos, no nos hemos sentido protegidas por el Estado”, dice Sanjuán, la lucha ahora es por la implementación, es necesario que las acciones del Estado velen por el derecho de estas mujeres, pues, son clave para la construcción de la paz en el país.
“Esperamos que, no se quede en un papel y se haga realidad la protección”, finaliza Teresa Sanjuán, que logró, junto con las demás buscadoras del Colectivo 82, el reconocimiento y los grados honoríficos de ocho de los trece jóvenes desaparecidos.
La aprobación del proyecto de ley reconoce la persistencia inquebrantable de las buscadoras.
