El nuevo año llega con la amenaza de una serie de ajustes tributarios que van a golpear el bolsillo de los colombianos. Los empleados cuyos ingresos sean superiores a $1.800.000 estarían obligados a pagar el impuesto retefuente, una medida que golpearía fuertemente los ingresos de los trabajadores del país.
El Gobierno pretende continuar gravando con más impuestos a los colombianos menos favorecidos, tanto así que el impuesto de retefuente sobre la base gravable de 1.800.000 pesos que se proponía en la posible reforma tributaria, es otra política en contra del pueblo.
El nuevo año llega con la amenaza de una serie de ajustes tributarios que van a golpear el bolsillo de los colombianos. Los empleados que sus ingresos sean superiores a $1.800.000 estarían obligados a pagar el impuesto retefuente, una medida que golpearía fuertemente los ingresos de los trabajadores del país.
Pablo Bustos, presidente de la Red de Veedurías Ciudadanas, critica: “el esfuerzo errado de grabar a los más afectados y vulnerables dejando intactas las grandes sumas de dinero, los sectores más ricos y las empresas más acomodadas del país que no tributan o tributan menos que las clases medias, es un error”.
Lo único claro que registra esta nueva reforma tributaria es que pondrá a más colombianos a pagar retefuente, hoy dos millones de colombianos lo hacen y lo que busca el Gobierno es que sean 2.300.000 los que cumplan con esta obligación al fisco.
Para Luis Alejandro Pedraza, presidente de la CUT, “Con esta medida los más castigados serán los de salarios más bajos, por cuanto esto implica que quienes devengan un salario entre millón quinientos y millón ochocientos mil pesos entrarían en la lista de declarantes, lo que traería una reducción ostensible en su ingreso”.
Por otro lado hay quienes sostienen que la nueva reforma promoverá el no pago de los tributos. “Esto derivará en nuevas prácticas de evasión. Se advierte cómo los obligados o destinatarios con esta medida, sin duda, tenderán a subfacturar los servicios por un valor inferior para no ser cubiertos por este gravamen”, afirmó Pablo Bustos.
Es inaceptable que el Gobierno quiera cobrarle más impuestos a los colombianos, y menos sin plantear una lucha contra la corrupción, que hoy le deja un desequilibrio económico a la nación y que en la actualidad tiene quebrados a los sectores de la salud y la educación.