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Tras las puertas de los hogares

Otro estudio advierte sobre el déficit de trabajo decente en el mundo. Los abusos que se presentan en una labor con poca valoración por parte de la sociedad. Son 52 millones de trabajadores y trabajadoras domésticas

La OIT llama a dignificar el trabajo doméstico.
La OIT llama a dignificar el trabajo doméstico.

Juan Carlos Hurtado Fonseca

La principal conclusión del estudio de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, sobre las trabajadoras y trabajadores domésticos del mundo es que esta labor representa una parte significativa del empleo asalariado, pero los trabajadores domésticos siguen, en su mayor parte, fuera del alcance de la legislación laboral, por lo que carecen de la protección jurídica de que disfrutan los demás trabajadores.

El estudio publicado el pasado 9 de enero se basa en informes oficiales de 117 países y asegura que en 2010 hubo 52,6 millones de trabajadoras domésticas. Pero advierte que las cifras son estimaciones y no incluye trabajadores de menos de 15 años que suman 7,4 millones. Según el informe, es un trabajo que “representa el 3,5 por ciento del empleo de las mujeres, y en algunas regiones tanto como una de cada cinco trabajadoras (Oriente Medio) o a una de cada seis (América Latina y el Caribe) mujeres trabajadoras son trabajadoras domésticas”.

La OIT expresa que los trabajadores domésticos a menudo soportan salarios muy bajos, horas de trabajo excesivas, día de descanso semanal no garantizado y en ocasiones se enfrentan a situaciones de vulnerabilidad frente a abusos físicos, mentales y sexuales o a limitaciones en su libertad de movimientos. La explotación de los trabajadores domésticos puede atribuirse en parte a lagunas existentes en la legislación laboral y del empleo de los países, aunque a menudo es el reflejo de un trato discriminatorio por razón de sexo, raza o casta.

El informe revela que solo el 10% de los trabajadores está cubierto por la legislación laboral de su país y el 29,9% excluido totalmente de ella. Existen situaciones intermedias.

Salarios

Según la OIT, aunque los bajos salarios pueden atribuirse en parte al hecho de que los requisitos formales en materia de competencias en el sector suelen ser poco exigentes, hay otros factores que juegan un papel importante en esta situación, como la poca valoración de que es objeto el trabajo doméstico por parte de la sociedad y la debilidad que caracteriza la posición negociadora de los trabajadores domésticos.

Las deducciones de los salarios en concepto de alimentos y alojamiento son otra área vulnerable. Estos pagos parciales “en especie” son habituales, sobre todo en aquellos casos en que los trabajadores tienen que vivir en las instalaciones de su empleador.

Trabajadoras madres

El estudio destaca que al ser la gran mayoría de los trabajadores domésticos mujeres, el derecho a la protección de la maternidad es una preocupación de especial importancia; “En la actualidad, más de una tercera parte de todas las trabajadoras domésticas no tienen ni derecho a la licencia de maternidad ni a las prestaciones de maternidad en metálico asociadas. Las brechas de cobertura son particularmente importantes en el Oriente Medio y Asia, pero también existen deficiencias en otras regiones. Incluso en aquellos casos en que los trabajadores domésticos están incluidos en los regímenes de seguridad social que proporcionan prestaciones de maternidad, la existencia de criterios de elegibilidad restrictivos pueden obstaculizar el acceso a las mismas en la práctica. Con todo, la experiencia de países como el Brasil muestran que la inclusión de los trabajadores domésticos en el régimen de base de la seguridad social puede obtener buenos resultados. Otra alternativa son las prestaciones financiadas con fondos públicos”.

La tarea…

En el informe la OIT llama a sindicatos, gobiernos, empleadores y organizaciones de trabajadores domésticos a dignificar la labor y a que estas trabajadoras estén protegidas por la legislación laboral.

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