Superadas las secuelas de la pandemia y con la adopción de políticas acertadas, se dan las condiciones para un mayor crecimiento económico en los próximos dos años
Iván Posada P.
El año pasado, el PIB creció apenas 0,6 por ciento, resultado significativamente menor comparado con los dos años anteriores (gráfica 1). La causa es el bajo desempeño de sectores como la industria, la manufactura, la construcción y el comercio. Otros factores como las altas de interés (12,75) y de inflación (9,28 por ciento) también contribuyeron a este bajo crecimiento.
Gráfica 1: Producción industrial julio 2023/enero 2024
El informe del DANE en el primer trimestre de este año es positivo. En enero y febrero, la economía creció 1,6 y 2,5 por ciento, respectivamente, según este informe. Dos meses continuos de crecimiento indicarían que el gobierno del Pacto Histórico ha acertado en la adoptación de la política económica. La cartera de hacienda había pronosticado que la economía en 2023 habría tocado fondo y, a partir de ahí, se iniciaría un ciclo de recuperación para los próximos años.
Comportamiento por sectores
Este balance se explica por el buen desempeño del sector primario (agricultura y minero energético), el cual creció 10,2 por ciento. La agricultura, a pesar del fenómeno de El Niño, presenta una amplia oferta de productos y, en consecuencia, precios más accesibles al consumidor final y, por otro lado, se va superando gradualmente el alto costo de los insumos agrícolas importados.
Otras cifras
La inflación en febrero de este año se ubicó en 7,7 por ciento y, con base en esto, el Banco de la República redujo la tasa de interés en medio punto (0.5) porcentual y quedó en 12,5 por ciento, una señal al sector privado, que viene argumentando falta de confianza y garantías para invertir en sectores como vivienda e infraestructura, que le reportan cuantiosas rentabilidades.
El sector servicios (transporte, comercio, finanzas) creció en enero de este año 1,0 por ciento, lo que muestra también un cambio de tendencia con respecto al año pasado.
Gráfica 2: Crecimiento 2021–2023
El obstáculo
El sector secundario, la industria manufacturera, cuarto generador de empleo (10 por ciento del total), completó doce meses continuos en descenso, situación preocupante por el papel que juega en el total de la economía (gráfica 2). En el período feb. 2023/feb. 2024, redujo su producción total en -5,5; las ventas en -5,0 y el personal ocupado -1,1 por ciento. Entre los subsectores que presentaron mayor disminución de su producción están la fabricación de automotores y sus partes, remolques, lo mismo que la producción de carrocerías. Esta situación requiere acelerar el proceso de reindustrialización esbozado en el Plan Nacional de Desarrollo.
“La agricultura, a pesar del fenómeno de El Niño, presenta una amplia oferta de productos y en consecuencia, precios más accesibles al consumidor final, y por otro lado, se va superando gradualmente el alto costo de los insumos agrícolas importados”.
Tasa de desempleo
Al comparar el desempleo de enero de 2023 con el mismo período de 2024, se presenta una variación de 11,4 a 11,7 por ciento (gráfica 3). A pesar de la desaceleración presentada en 2023, el mercado laboral a la fecha no se ha visto afectado por este fenómeno, ubicando la tasa de desempleo anual en 10,2 por ciento, muy similar a la existente en prepandemia, 10,9 por ciento (gráfica 3). El empleo creado en el sector público (educación, defensa, salud, servicios), el año pasado, ha contribuido a mantener un nivel de desempleo relativamente bajo, muy cercano al existente en prepandemia.
Gráfica 3: Tasa de desempleo 2023–2024
Informalidad laboral
La Gran Encuesta de Hogares, GEIH, basada en el muestreo a las unidades de producción (empresas), indica que entre noviembre de 2023 y enero de 2024 la proporción de ocupados informales fue de 55,7 por ciento, una disminución de 2,0 puntos porcentuales respecto al mismo trimestre del año anterior (57,7 por ciento).
Parte de la informalidad se viene contrarrestando a través de incrementos de los subsidios a los sectores más vulnerables como mujeres cabeza de hogar y adulto mayor. Otros mecanismos son la mayor cobertura y gratuidad en la educación superior, el pago de las prácticas a los estudiantes SENA, condonación de créditos del ICETEX a estudiantes, entre otros. Es claro que la informalidad no se resuelve con base en el asistencialismo en el largo plazo, la solución pasa por una agresiva política de formalización, es decir, empleo digno.
Inversión y deuda externa
Uno de los obstáculos para un mayor crecimiento es la reducción de la inversión pública y privada. Respecto de la primera, el gobierno actual heredó la deuda a corto plazo adquirida por la administración Duque con el Fondo Monetario Internacional en 2020, por lo cual debe destinar importantes recursos del presupuesto nacional al pago de capital e intereses entre 2023 y 2025. La propuesta del gobierno es trasladar esta deuda del corto al largo plazo de tal forma que se liberen recursos para la inversión, la reactivación de la economía y el gasto social. El presidente Petro solicitará a la jefa del Fondo, Kristalina Georgieva, mejorar el perfil de la deuda, porque, dijo, nos están “ahogando y ahorcando”.
De acuerdo con los datos de este primer trimestre, y si la inflación continúa reduciéndose y el Banco de la República rebaja la tasa de interés más aceleradamente, un pronóstico inicial indica que el PIB de 2024 crecerá 1,5 y 2,8 por ciento en 20251 . Fedesarrollo, por su parte, lo estima en uno por ciento. En síntesis, un buen inicio de año que permite pronosticar mayor crecimiento para los próximos años.