Quedan tres semanas para que el país escoja entre una propuesta para democratizar la sociedad, o por el contrario, dar un salto al vacío con el uribismo en cuerpo ajeno
Juan Carlos Hurtado Fonseca
@aurelianolatino
Dos sorpresivos hechos caracterizaron los resultados de los comicios en la primera vuelta presidencial: el tercer lugar de Federico Gutiérrez, candidato oficial del uribismo quien queda por fuera de la contienda, y el paso a la segunda vuelta de Rodolfo Hernández.
Lo contradictorio está en que, aunque no pasó el uribismo, pasa a segunda vuelta un político, que, sin propuestas serias sin mostrar un programa de gobierno, recibirá el apoyo del Establecimiento en su afán por detener la opción de cambio representada en Gustavo Petro.
Pero, ¿quién es el nuevo contrincante de Petro? Es un ingeniero civil de 77 años, empresario de la construcción y ex alcalde de Bucaramanga a quién la CNN denomina como el Trump colombiano, pues cuenta con una fortuna de alrededor de 100 millones de dólares, como él mismo lo dijo en entrevista a un medio de comunicación, riqueza que se distribuye en tierras un 70% y el restante en los negocios de los productos que vende.
Su limitado alcance intelectual se evidencia en entrevistas en las que de manera espontánea muestra su forma de pensar y apuesta política: Admira a Hitler, está agradecido con Álvaro Uribe por el apoyo que le dio como alcalde, no sabe qué es Vichada, cree que las mujeres deben estar en la casa mientras los hombres gobiernan, se ufana de tener a personas durante 15 años pagándole intereses, amenazó con dispararle a un hombre, golpeó a un concejal por denunciar su posible corrupción, abiertamente expresa que incumplió al no entregar ningún lote con servicios de los 20 mil que prometió, y dice que para los empresarios el mejor negocio es tener gente pobre con capacidad de consumo.
Un salto al abismo
Estas frases y varias de sus acciones lo configuran como un machista, neoliberal, y en un posible gobierno suyo el país tendría la versión criolla de Trump en Estados Unidos; Duterte en Filipinas; Bukele en El Salvador; Bolsonaro en Brasil; Abdalá Bucaram en Ecuador o Fujimori en Perú. Un salto al vacío.
Por hechos como los mencionados, la electa a la Cámara de Representantes por el Pacto Histórico María Fernanda Carrascal expresó que el uribismo no ha muerto, que los mayores exponentes de las ideas del expresidente como Paloma Valencia y María Fernanda Cabal, ya están en la campaña de Hernández.
La dirigente política se refiere a los tuits de las políticas del Centro Democrático el 29 de mayo: “El triunfo de Rodolfo es el triunfo contra el establecimiento. El país necesita cambios, no el suicidio que ofrece Petro, pero sí autoridad, orden y la prosperidad que ofrece un empresario como el @ingrodolfohdez”.
Por su parte, Valencia trinó: “Felicitamos al ingeniero @ingrodolfohdez por su gran votación. Apoyaremos su propósito de combatir la corrupción y derrotar a Petro”.
Por otra parte, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, Francisco Maltés también indicó que la carta de Uribe es Hernández: “Los trabajadores y trabajadoras saben que este señor es lo mismo que Duque y Uribe, el verdadero cambio está en Petro”.
A conquistar nuevos votos
Para la segunda vuelta, el régimen, con sus medios de comunicación, seguirá aprovechándose del trasnochado discurso anticomunista, del “castrochavismo”, del miedo al cambio y del miedo a lo desconocido que persiste en los imaginarios colectivos y que explican el ascenso de Hernández. Pues, aunque la gente está cansada de lo mismo, ve en él una cara nueva, sin haber entendido que es más de lo mismo, o que puede ser peor.
El ingeniero es un candidato que evadió debatir y que no ha explicado a profundidad su programa de gobierno. Su proyecto no pasa de un lema insulso contra la corrupción, bien aprovechado por sus estrategas de campaña que lo difundieron en redes sociales y medios.
Pero, ese discurso se contradice con sus propios hechos, pues la Procuraduría lo destituyó como concejal de Piedecuesta, Santander, en 1995, lo sancionó por cinco meses en 2020 y actualmente lo investiga. Asimismo, es investigado por la Contraloría y la Fiscalía por hechos de corrupción durante su administración de Bucaramanga y está citado ante un juez penal el próximo 21 de julio.
Por otro lado, la campaña del Pacto Histórico deberá trabajar por reconfigurar sus tácticas, las temáticas, los mensajes, los canales, las narrativas y los targets. Sin embargo, la mayor responsabilidad recaerá sobre los votantes o seguidores de Gustavo Petro.
Los 8.527.768 sufragantes de la primera vuelta deberán ganar nuevos votantes, para lo cual se debe entender que no todos quienes votaron por Fico necesariamente van a votar por el ingeniero, hubo 366.623 votos en blanco, hay indecisión en los votantes de Sergio Fajardo y alrededor de 20 millones de abstencionistas. Hay de dónde echar mano.
A persuadir
Ahora bien, con base en las necesidades de la juventud, evidenciadas en los estallidos sociales de 2019 y 2021, y en los pronunciamientos misóginos del candidato Hernández son las mujeres, los y las jóvenes las llamadas a protagonizar esta tarea. Se debe hacer con una argumentación respetuosa “con diálogos en nuestras casas, con nuestras madres, con nuestras hermanas, con nuestras compañeras. En diálogos con los jóvenes trabajadores, con estudiantes, con la gente del campo que ha padecido la quiebra por la apertura económica y ha padecido la guerra”, argumenta Gabriel Becerra, secretario general de la Unión Patriótica y representante a la Cámara electo por el Pacto Histórico.
María Fernanda Carrascal también entrega razones para convencer a nuevos electores: “nos ha tratado a las mujeres como ciudadanas de segunda categoría diciendo que debemos quedarnos en la casa y no en los escenarios de toma de decisión y de poder. Así que yo como mujer le digo a Rodolfo Hernández que con las mujeres no cuente”.
Trabajadores y estudiantes
Los trabajadores, sindicalizados o no, también tienen una gran responsabilidad. Por eso, el presidente de la CUT les pide tener en cuenta que Hernández no ha hecho propuestas desde el punto de vista laboral ni económico, sino que se dedica a hablar de la corrupción, de lo que está untado: “En Bucaramanga tuvo una posición antisindical y a los trabajadores oficiales, que tienen derecho a la negociación, a la contratación y a la huelga, los convirtió en empleados públicos sin derechos y a otros los echó. Además, nunca quiso negociar los pliegos de peticiones de los empleados del municipio y desconoció todos los acuerdos laborales firmados con anterioridad”.
Kevin Siza Iglesias, dirigente de la Asociación Colombiana de Estudiantes Universitarios, ACEU, se suma al llamado a la juventud y a los estudiantes para que se pongan la 10 y conquisten nuevos votantes por Petro. Porque se está muy cerca de conseguir algunas de las garantías que el movimiento estudiantil y juvenil ha venido exigiendo desde hace décadas.
“Que se movilicen a los barrios, a las universidades, al transporte público, a los colegios a convencer a la juventud. Que comprenda que las y los jóvenes somos los únicos responsables de transformar la historia de nuestro país y avanzar en la construcción de un escenario que permita, por ejemplo, el acceso universal a la educación superior. Desde el movimiento estudiantil los invitamos a ampliar nuestro contacto con la gente, a ampliar nuestras iniciativas. ¡A redoblar esfuerzos en estos días!”, concluye Kevin Siza.
