Justo después de que se pusieran en cintura a empresas comercializadoras de gas por cobros abusivos, el Ministerio de Minas y Energía y la Agencia Nacional de Hidrocarburos informaron que hay un punto de inflexión en la caída de reservas de gas, que desde hace 12 años se presenta en el país, y que los nuevos hallazgos las duplican
Juan Carlos Hurtado Fonseca
@aurelianolatino
El 17 de mayo, la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios dio a conocer una resolución en la que, “impuso a Vanti S.A. E.S.P. un Programa de Gestión con el objetivo de que ajuste la tarifa del servicio público de gas natural a partir del consumo de diciembre de 2024 facturado en enero del 2025 y devuelva a los usuarios los montos a los que haya lugar”.
La decisión se dio “tras encontrar que el incremento del 4,95% en enero y del 35,5% en febrero, no estaban justificados puesto que la empresa contaba con las reservas suficientes de gas natural nacional para suplir la demanda esencial”.
Según la Superservicios, se revisó la facturación y la información suministrada por la empresa y disponía de suficiente gas, aunque decidió reportar una disponibilidad menor e insuficiente con el propósito de justificar su importación con destino a la demanda esencial, es decir, a los hogares, pequeños comercios y al sistema de transporte.
Además, se ordena a Vanti recalcular las tarifas, devolver el 100% de las sumas cobradas en exceso y garantizar no volver a incurrir en cobros indebidos. Así las cosas, esta empresa deberá regresar el dinero a alrededor de 2,5 millones de hogares víctimas del abuso.
De la misma manera, la Superservicios también encontró que Alcanos incrementó las tarifas en el 51% a partir del consumo de enero con efectos hasta la fecha, sin justificación puesto que la empresa contaba con las reservas suficientes de gas natural nacional para suplir con prioridad la demanda esencial.
Más de un millón de hogares que recibirán la devolución o compensación de esta empresa se encuentran en los departamentos de Antioquia, Boyacá, Caldas, Caquetá, Cauca, Cundinamarca, Huila, Nariño y Tolima. Esta deberá ser del 100% del valor total cobrado indebidamente, sentenció la Superintendencia.
Reacciones
Por su parte, en comunicado la Empresa Vanti respondió: “Estas decisiones se tomaron con desconocimiento de la regulación vigente, errores de cálculo y extralimitación de funciones, donde además hay prejuzgamiento y otras violaciones al debido proceso, e ignorando que Vanti dio respuesta transparente a todos los requerimientos de manera detallada, suficiente y oportuna”.
Asimismo, anunció que se interpondrán acciones legales contra la Superintendencia y que solicitarán el acompañamiento de la Procuraduría General de la Nación, para que vigile el proceso.
A su vez, Alcanos respondió que no incumple la regulación ni normatividad vigente, “teniendo en cuenta que la contratación de gas importado tuvo como principal objetivo cubrir el déficit de gas a partir del mes de diciembre 2024 para garantizar la prestación continua e ininterrumpida del servicio sin excepción alguna”. Aunque no habló de extralimitación de funciones de la Superservicios, también anunció acciones legales.
El debido proceso

Por su parte, el exministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, le dijo a VOZ que la Superintendencia actuó con un debido proceso: “Nosotros desde el Ministerio entregamos información porque ya teníamos los indicios de que algo estaba ocurriendo de forma irregular. La investigación y este resultado les pasó por un debido proceso, se les preguntó a ellos, se les pidió información, documentación y esta no fue satisfactoria. Así está en el expediente de la superintendencia”.
En diciembre pasado hubo un problema con una planta de Ecopetrol, lo que sirvió para que Vanti argumentara que no tenían gas suficiente porque la estatal petrolera no les había entregado un contrato, lo que los había obligado a importar. “Nosotros resolvimos el problema de Ecopetrol y el gas que ellos necesitaban estaba operativo. Entonces, la argumentación no era veraz”, contradice el exministro.
“De hecho, cuando la Superintendencia les pregunta por los contratos, no pudieron entregar ningún otro, sino lo que ya habían acordado con Ecopetrol, es decir, tenían el abastecimiento de gas garantizado, pero puede ser que en ánimo de ganarse alguna plata e incrementar sus ganancias o por alguna medida interna económica decidieran incrementar las tarifas, pero fue un cobro indebido, sin argumentos, sin ninguna validez”, señala Camacho.
Tatequieto a abusadores
El exministro manifiesta que estas empresas hacían lo que querían porque estaban acostumbradas a que no se tomaban medidas: “Pero parte de lo que ha venido ocurriendo por toda esta discusión de hidrocarburos, del gas, es que hemos puesto más la lupa a ciertos asuntos como el de la energía eléctrica, que seguramente anteriormente no tenía tanto debate, así como en términos del servicio de gas”.
Asimismo, advierte que lo que hay de fondo para el accionar de estas empresas o grupos económicos es intentar modificar la política de hidrocarburos del Gobierno nacional.
Hay que tener en cuenta que a poderosos sectores económicos no les agradó la decisión de Gustavo Petro de no ampliar la frontera extractiva, es decir, no entregar más contratos de exploración de hidrocarburos y tener mayor eficiencia con lo ya contratado, que son cerca de 20 millones de hectáreas y más de 300 contratos.
“Esa decisión política se ha intentado modificar con presiones, debates, mentiras y es todo el esfuerzo de esos sectores políticos que defienden esa política de hidrocarburos para que modifiquemos esa posición y que volvamos a abrir la frontera extractiva del país”, explica el exministro.
Nuevos yacimientos de gas
Entre las narrativas que la oposición intenta imponer en las opiniones públicas está el cuestionamiento a que se detenga la firma de nuevos contratos de exploración, mientras se importa gas por la insuficiencia en la producción nacional.
Andrés Camacho responde que desde 2016 se importa este combustible a través de una infraestructura llamada Regasificadora del Caribe, cuya propiedad es el Grupo Aval. “Ese gas se ha usado hasta el momento para la generación de energía eléctrica. Entonces, algunos hoy lo satanizan como si fuera un gran problema, pero en sí mismo no lo es siempre y cuando logremos que esa importación sea a un precio justo”.
Agrega que este Gobierno ha enfrentado déficits y deudas en el sector energético, que hay una declinación de la producción de gas en el país, al punto que en los últimos 10 años ha habido caídas año a año; en promedio de un año de caída en cada periodo de las reservas de gas.
El exministro también manifiesta que nuevos contratos de exploración no significan más gas o petróleo, pero que se sigue explorando: “Si nosotros diéramos un contrato hoy, el tiempo mínimo de madurez de un proyecto de esos pueden ser siete u ocho años. Es decir, que entregar más contratos no resuelve el problema o la situación inmediata. Es falsa esa argumentación porque en energía, en gas, en todos estos asuntos, el planeamiento es de largo plazo. Y segundo, porque lo que tenemos más cerca es el gas que ya se encontró con contratos existentes, especialmente en el Caribe colombiano, el gas offshore, en La Guajira, en mar adentro, que lo tenemos a dos o tres años para poderlo utilizar”.
Punto de inflexión

Claramente, las deficiencias que enfrenta actualmente el sector son el resultado de las políticas adelantadas en su momento, por quienes estuvieron al frente del Gobierno hace siete u ocho años, y no tomaron las medidas para que hoy no se esté enfrentando una estrechez de gas.
“Ecopetrol es el mayor productor de gas, pero también es su mayor consumidor. Y está prácticamente en manos de Ecopetrol que pudiéramos garantizar el abastecimiento del país para este año y así lo hicimos, no hemos tenido ni un solo segundo de desabastecimiento y, por ejemplo, dejamos todo el abastecimiento garantizado para 2025”.
Así las cosas, este Gobierno se ha dedicado a sacar el mayor provecho a los pozos existentes, mejorando la eficiencia, al tiempo que adelanta una transición energética en Ecopetrol.
Así también lo evidenció Orlando Velandia, presidente de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ANH, al presentar el 30 de mayo los resultados del Informe de Recursos y Reservas, IRR, 2024, en un medio de comunicación en el que se señala: “En gas, la relación reservas/producción cambió su tendencia, pasando de caer un año por vigencia, a solo 2 meses entre 2023 y 2024, siendo de 5,9 años para 2024. Adicionalmente, la reposición de reservas fue de 42 Giga pies cúbicos, siendo positiva a diferencia del año anterior”.

Miedo infundado
Acerca del miedo infundado por la oposición, por la baja producción de gas en este Gobierno y la no firma de nuevos contratos de exploración, Velandia aclaró: “La gente ha venido escuchando por algunos gremios que efectivamente nos vamos a quedar sin gas, que el petróleo no va a alcanzar para los próximos años. Se nos olvida que llevamos una tendencia decreciente de más de 10 años en las reservas de gas, y por fin creo que empezamos a encontrar un punto de inflexión”.
En los últimos tres años se han incorporado más descubrimientos de recursos con los contratos ya firmados. En otras palabras, en la actual administración se está encontrando más gas y más petróleo que en otras administraciones sin haber firmado más contratos; se hace más eficiente lo que se tiene: “La línea clara del Gobierno es ‘hagamos más eficiente lo que tenemos’, nos hemos quedado en una narrativa de que si no se firman contratos no descubrimos. En el informe demostramos que en los últimos ocho años la incorporación, vía nuevos descubrimientos resultado de contratos, es muy mínima en proporción a lo que sí hemos logrado adicionar, vía aprovechar los recursos, hacer más eficiente lo que tenemos”.
Además, sobre el gas offshore en el Campo Sirius en el Mar Caribe que menciona el exministro, Velandia complementa: “Ese gas representa el mayor hallazgo de la historia del país, y va a llevar a las reservas a un 200%, con ese gas podemos tener el abastecimiento cubierto hasta 2050. Entonces, no es necesario hacer más contratos ni ampliar la frontera extractiva porque ya encontramos un gas que nos va a dar soberanía y autosuficiencia”.
Pone como reto empatar este periodo de tiempo, en el que se está terminando el gas que está en tierra, con la entrada en operación del que está costa afuera: “Ahora, corresponde llevar rápidamente ese gas a los ductos, a las líneas de flujo”.
El futuro cercano
Velandia enfatiza en que en los últimos 11 años se han hecho 48 descubrimientos de gas, y que en los tres años del actual Gobierno se han hecho 15 de ese total, producto de la optimización de recursos, o sea, haciendo más eficiente lo existente: “Los recursos contingentes los hemos incrementado casi en el 100%, es decir, hemos duplicado lo que teníamos antes de comenzar este periodo de Gobierno”.
Y, al hacer referencia al caso de Vanti y Alcanos, el presidente de la ANH indicó que desde esa entidad se está trabajando para que los colombianos tengan el gas de producción nacional, porque “esa es otra cosa que hay que precisar, el gas en Colombia se importa desde 2016, pero ahora gran parte de ese gas que está orientado por demanda esencial a los hogares, se orientó a otros sectores y ese gas que se importa desde 2016, más costoso, tuvo que ser orientado a atender esa demanda esencial porque no se le dio prioridad con el gas barato a los colombianos”.
Por último, señaló que, si en los próximos años no se toman las medidas para ofrecer gas de producción nacional, puede haber déficits: “Pero desde el Ministerio, Ecopetrol y la Agencia se han mostrado las medidas que se están tomando para que esa brecha se reduzca ostensiblemente, mientras llega el gas descubierto en el Mar Caribe, que duplica las reservas que históricamente se han tenido”.