El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, General de Ejército Raúl Castro Ruz, dijo hoy en la ONU que la comunidad internacional podrá contar siempre con la sincera voz de Cuba frente a la injusticia

Redacción Internacional
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Durante su intervención en el segmento de alto nivel del 70 periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Raúl abogó por un orden internacional más justo y equitativo, en cuyo centro se ubique al ser humano, su dignidad y bienestar.
El General de Ejército recordó cómo, hace 70 años y a nombre de los pueblos, se suscribió la Carta de la ONU y se estableció un compromiso para preservar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra.
Sin embargo, recordó el Presidente cubano, desde entonces han sido constantes las guerras de agresión e intervenciones en los asuntos internos de los estados, derrocamientos por la fuerza de gobiernos soberanos, golpes suaves y la recolonización de territorios.
En ese sentido, afirmó que las técnicas se han perfeccionado con formas de actuar no convencionales y el empleo de nuevas tecnologías, esgrimiendo el pretexto de supuestas violaciones de los derechos humanos.
Aseguró al respecto que es inaceptable la militarización de ciberespacio y el uso de las nuevas tecnologías para agredir a otros estados.
Respecto a los derechos humanos, dijo que el tema sigue siendo utilizado de manera selectiva y discriminatoria para validar e imponer decisiones políticas.
Las causas de los conflictos deben buscarse en la pobreza y desigualdad generados por el colonialismo y el despojo, primero y por el imperialismo después, agregó.
Raúl señaló que, a pesar de la Carta de la ONU y los principios que defiende, el disfrute de los derechos fundamentales sigue siendo una utopía para millones de personas.
Mencionó que el mundo todavía hay 781 millones de adultos analfabetos y 17 mil niños mueren de enfermedades curables cada día.
Entretanto, los gastos militares son superiores a los 1,7 millones de millones de dólares.
Solo con una fracción de este monto, dijo Raúl, podrían solucionarse los problemas más acuciantes de la humanidad.
Incluso en los países desarrollados, añadió, han desaparecido las sociedades de bienestar que se mostraban como ejemplo para el mundo.
Los sistemas electorales y partidos tradicionales que dependen del dinero y la publicidad son cada vez más ajenos y distantes de las aspiraciones de los pueblos, afirmó.
Raúl refirió que el cambio climático pone en peligro la existencia de la humanidad y el tema se debe abordar desde el criterio de responsabilidades comunes pero diferenciadas.
Las consecuencias del cambio climático son especialmente devastadoras en los países insulares e imponen una atención adicional a sus frágiles economías. Lo mismo sucede en África con el incremento de la desertificación, agregó.
Criticó en ese sentido el consumismo irracional e insostenible del capitalismo actual.
El General de Ejército destacó en su intervención la creación de la Celac y particularmente la la firma de los jefes de Estado y Gobierno en enero del 2014 de la proclama de América Latina y el Caribe como zona de paz.
Raúl dijo que con esa declaración quedó demostrado que por encima de nuestras diferencias, podemos avanzar hacia la unidad y la consecución de objetivos comunes en el marco de nuestra diversidad, lo cual generó aplausos entre los asistentes.
El presidente cubano resaltó que la proclama defiende que el pleno respeto al derecho inalienable de todo Estado a elegir su sistema político, económico, social y cultural constituye una condición esencial para la convivencia pacífica entre las naciones.
Raúl ratificó la solidaridad de Cuba con Venezuela frente a los intentos de subvertir su ordenamiento constitucional y destruir la obra del compañero Hugo Chávez, continuada por el presidente Nicolás Maduro a favor del pueblo venezolano.
Asimismo, señaló que la Isla también se solidariza con Ecuador, su Revolución Ciudadana y la figura de líder Rafael Correa, que se ha convertido en blanco del mismo guión de desestabilización aplicado contra otros gobiernos progresistas de la región.
También mostró la solidaridad cubana con la petición de las naciones caribeñas de ser compensadas por el periodo de la esclavitud.
Ratificó, asimismo, la convicción de que el pueblo de Puerto Rico merece ser libre e independiente, luego de más de una centuria sometido a la dominación colonial.
De la misma manera, recordó el apoyo de Cuba a la causa Argentina respecto a las Islas Malvinas y el apoyo solidario a la presidenta Dilma Rousseff en la defensa de sus importantes logros sociales y la estabilidad del país.
Rechazó, por otra parte, la intención de extender la presencia de la OTAN hasta las fronteras de Rusia y la aplicación de sanciones unilaterales e injustas contra esa nación.
Ver: Texto íntegro de las palabras del General de Ejército Raúl Castro Ruz en Naciones Unidas