Privatización, tercerización laboral e imposición de turnos de 12 horas, denuncian trabajadores
Redacción laboral
La junta directiva de la Unión Sindical Obrera (USO) del Huila expresó su rechazo contra varias políticas de la administración de la estatal petrolera, que no solo afectan a los trabajadores, sino a la empresa y a los ingresos del país.
En primer lugar, se oponen a entregar las áreas de producción, transporte y refinación a empresas multinacionales y contratistas nacionales, por ser estas actividades misionales y permanentes de la industria, es decir: rentables.
Ecopetrol en 2013 generó con estas áreas operativas más de 13 billones de pesos en utilidades, por lo que se preguntan: ¿Por qué deben pasar a terceros? Es una empresa que le pertenece a todos los colombianos.
Con la tercerización laboral y entrega de estas operaciones se dieron seis mil contratos, casi igual número de empresas se beneficiaron y le costaron a Ecopetrol más de 12 billones de pesos, en donde los costos laborales no alcanzaron el cinco por ciento de este monto. ¿Con cuántas utilidades se quedaron las empresas aliadas de Ecopetrol? ¿Cuántas garantías laborales les quitaron a los trabajadores y a los colombianos con la explotación de estos campos de producción?
Igualmente, la administración fomenta la tercerización laboral al punto que hoy existen más de 30 mil trabajadores de los cuales 8.800 son directos y solo 2.300 son convencionales. El 65% de los trabajadores tercerizados hoy laboran en actividades misionales aunque deberían estar contratados a término indefinido.
Con esta política antiobrera, se cercena a los trabajadores de firmas contratistas estabilidad laboral, con contratos de dos y tres meses; su futuro pensional es incierto; el escalafón cada vez es desmejorado, al igual que los salarios y prestaciones, y cuando sale un nuevo contrato exigen perfiles altos para ingresar.
Explican que los tercerizados no pueden acceder a préstamos de vivienda, auxilios, educación para sus familias, se les niega el derecho a tener espacios de recreación y esparcimiento, y los servicios de salud son a través de una EPS.
Además, Ecopetrol intenta imponer la jornada laboral o turnos de 12 horas, aplicada inicialmente con los trabajadores directos. Con la jornada laboral supuestamente de 4×3, 8×7 o 14×7 no se pagaría el 0,5% hora extra por turno laborado, desaparece lo acordado con turnos de ocho horas como lo establece la convención.
Según la USO, la administración pretende reducir nómina directa y contratistas, pago de EPP, EPS, ARP, pago de buses, horas de recorrido, raciones de alimentación y reducción de los puestos de trabajo. Con esta programación se da la eliminación de la habitualidad del día dominical y festivo.
Asimismo, se propende por la afectación en salud y la seguridad en el trabajo, pues implica más riesgo por exposición a sustancias cancerígenas, por lo que ya piensan en que el sindicato analice el impacto en cada una de las regiones, con presencia de trabajadores directos.
Finalmente advierten los trabajadores, “si Ecopetrol insiste en imponer turnos de 12 horas, la orientación es pedir la constatación por parte del Ministerio del Trabajo para solicitar la investigación y sancionar si es necesario. Además, unirnos con las comunidades y rechazar dicha imposición por los perjuicios colectivos que traerá esta política”.