Willi Sitte nacio en Kratzau (Checoslovaquia). Fue uno de los máximos exponentes de la cultura y el arte del realismo socialista, y durante un largo tiempo presidente de la Asociación de Artistas Visuales (VBK) de la RDA. Trabajo para la Wehrmacht en Alemania y desertó para unirse a los partisanos italianos hasta que en 1947 regresó a Alemania.
Sitte es considerado como uno de los fundadores del movimiento del realismo socialista que incluía artistas como Bernard Heisig, Wolfgang Mattheuer o Werner Tübke. Tras la disolución de la RDA Willi Sitter fue postergado a ocupar un segundo lugar por la imposición de los gobiernos occidentales. Por haber sido militante comunista y miembro de la Asamblea Popular, sus obras pasaron ocupar un segundo lugar.
“Willi Sitte siguió siempre fiel a sí mismo”, estimó la dirección del partido. “Sitte era un artista excepcional (…) que puso su arte al servicio de su compromiso político por el socialismo”.
Como pintor, Sitte fue influenciado por artistas como Léger, Picasso o el muralista mexicano David Siqueiros. Al principio pintó composiciones decorativas y lírica, pero en los años 50 su pintura adquirió una gran calidad pictórica. En la década de 1960, Sitte comenzó a concentrarse en los temas marxistas de la lucha de clases y la lucha contra el imperialismo. Durante este período, su influencia en los círculos artísticos de la RDA aumentó. La multiplicidad temática y de formas, los modos de expresión individuales con marcado contenido ideológico, entre las que destaca el Homenaje a Lenin.