Como cada año miles de asistentes se dieron cita en el Festival del semanario VOZ, espacio político y cultural en el que quedó reafirmada la necesidad y la voluntad de conseguir la unidad para construir la paz
Eran miles los rostros que se veían caminar por los distintos espacios que brindó el 31 Festival del periódico VOZ. Rostros curiosos, rostros familiares, rostros desconocidos, rostros militantes, rostros de estudiantes, rostros de artistas, rostros de madres, rostros de jóvenes, que se dieron cita en este sitio que ofrece este medio de comunicación cada año.
Pusieron sus miradas en los textos de Izquierda Viva, en las revistas de la Federación Sindical Mundial, en la exposición de carteles políticos del siglo pasado; pero también pusieron todos sus sentidos en espacios como el conversatorio sobre problemáticas internacionales, con representantes de las embajadas de Palestina, Cuba y Venezuela.
Los inocentes y felices rostros de la niñez tuvieron su espacio en el que hicieron rondas, saltaron lazo, se pintaron la cara, bailaron y jugaron trompo, entre otras actividades en las que participaron mientras sus padres disfrutaban de la oferta de actividades.
La caseta del tango inició su participación hacia el mediodía con una presentación de este baile argentino para dar paso a las canciones de este género que pedían los asistentes.
La poesía también tuvo un lugar, en el que el escritor José Luis Díaz Granados habló de la obra de Jairo Aníbal Niño, y diferentes poetas leyeron versos.
Algunas voces
Algunos asistentes al Festival expresaron sus impresiones sobre el evento y sobre las responsabilidades del periódico en una etapa posacuerdos. Para la directora del Teatro La Candelaria, Patricia Ariza: “VOZ es un referente fundamental, determinante e histórico en Colombia, al punto que uno no podría imaginarse a este país sin ese periódico. El festival es un acto masivo y unitario de la familia revolucionaria”,
Según el periodista y exgerente de Canal Capital, Hollman Morris: “VOZ ha contribuido con su existencia a la lucha por la democracia en Colombia, si entendemos que la democracia es la multiplicidad de las voces pero que todas las voces se oigan. La voz de VOZ se tiene que seguir escuchando y es importante para cimentar la democracia. El Festival es la ternura, es la solidaridad. De los actos políticos que más me han llegado al alma es este”.
Asimismo, el profesor Manuel Buitrago anotó: “Todo lo que ofrece el Festival es cada año mejor. Por eso vengo desde Duitama, por ver esa diversidad que logran hacer entre lo cultural, lo político, el trabajo con los niños, lo deportivo, todo es interesante”.
Desde Medellín también hicieron el viaje para cumplir con el compromiso militante: “El festival es un saludo a la paz, al momento político del país, a la unidad de la izquierda. Ojalá en las regiones como en Antioquia lográramos tener un espacio así donde se encuentre toda la izquierda”, anotó Alejandro Cometa.
Por su parte Andrés Gil, vocero de Marcha Patriótica comentó: “En el Festival queda el periódico VOZ refrendado como el semanario de la paz, constructor de unidad y cimentador de alternativas de poder popular. Hoy se vieron varias fuerzas de izquierda que deben cimentar la lucha por la paz y la pelea en las próximas elecciones de Bogotá, para consolidar a esta ciudad en un ejemplo de paz. VOZ está llamado a jugar un gran papel en el posacuerdo porque puede ayudar haciendo pedagogía para la paz, ayudar a que llegue con claridad el mensaje del contenido del acuerdo, y sobre todo, sus perspectivas. Es protagonista en esa apertura hacia una pluralidad informativa que debe haber, donde la izquierda debe ser protagonista”,
Uno de los asistentes más antiguos Carlos Martín rememoró: “Estoy viniendo a los festivales desde que se hizo el primero en el Parque Nacional. Recuerdo que eran unas casetas pequeñas y nos cayó un aguacero infernal que nos jodió todo. Recuerdo los festivales de tres días en el Coliseo El Campín. Sigue siendo muy bueno entendiendo que han sobrevivido a etapas difíciles y eso es un éxito total, por eso no sólo vengo sino lo apoyo para que pueda seguir jugando un papel dentro de la cultura política del país”.
“Nací en el Festival, he venido a todos ya que mi papá y mi mamá se conocieron aquí, en un festival de VOZ. Lo mejor que se ve aquí es el calor de la gente, de la izquierda, por eso siempre estaremos apoyando a la UP, aunque creo que hay algunas cosas para mejorar como el sitio, es lejos y difícil llegar. Los grupos que se presentan son muy buenos pero creo que hay que darle oportunidad a orquestas bogotanas que son muy buenas. Ojalá vuelva a ser de tres días”, comenta Paloma Morales quien afirma que desde niña ha estado asistiendo.
La candidata a edilesa en la localidad La Candelaria en Bogotá, Andrea Álvis comentó: “Me gusta porque me he encontrado con muchos artistas, hay muchos artistas que han venido no a presentarse sino a disfrutar. Le mejoraría algunas cosas: por ejemplo, falta un stand de cultura canábica y algo más relacionados con derechos sexuales y reproductivos que son una necesidad y una reivindicación del movimiento de mujeres. VOZ debe seguir siendo el espacio para los defensores de derechos humanos, los comunicadores, los periodistas alternativos, incluso de la Policía que es pueblo explotado. VOZ es la unidad del movimiento social y popular”.
Todos esos rostros regresaron a sus rutinas comprometidos con seguir construyendo los cimientos para una unidad política y social sólida, que permita ver un nuevo rostro para Colombia: el de la paz con justicia social.
