Una experiencia de lucha popular por la vivienda
Nelson Lombana Silva
Los voceros de las 350 familias que tomaron un predio para levantar el barrio “Pueblo Nuevo”, lote propiedad de Invías, concretaron un acuerdo provisional con el alcalde municipal, Luis Evelio Gómez Velasco, el pasado viernes primero de febrero, después de una prolongada y dura discusión en la cual el mandatario no ahorró términos para amenazar a los campesinos que se vieron precisados a acudir a las vías de hecho ante su incapacidad de resolver la aguda problemática en materia de vivienda, por su alto costo a raíz de la presencia de los megaproyectos en la zona, entre otros, el túnel de La Línea, la doble calzada y la megaminería con la presencia de la transnacional Anglo Gold Ashanti que viene a robarse la mina La Colosa y que el alcalde defiende con una tesis bastante ambigua: “La neutralidad”.
Fue una discusión amplia y complicada por la intransigencia del mandatario que en nada quería ceder, su única propuesta era que esta comunidad evacuara inmediatamente el terreno recuperado y quizás le pidiera disculpas a Invías por el atrevimiento. Por eso siempre colocó en primera línea la opinión del mayor de la policía Jorge Enrique Prieto y la inspectora de policía, Natacha Espinosa, quien mostraba con insistencia la orden de desalojo en tono amenazante.
Participaron organizaciones de derechos humanos, sindicales y populares, haciendo acompañamiento, entre otros: el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, seccional Tolima; Cenaprov nacional y regional, en cabeza de los compañeros Jaime Rivera y Raúl Rojas González, respectivamente; por el sindicato de trabajadores agrícolas del Tolima, Sintragritol, el compañero Gilberto Salinas Novoa; el dirigente de la Marcha Patriótica, Edgar Sánchez Cortés. Por los viviendistas: José Carri Hernández Ruiz, José Julián López, Cristian Camilo Zora, Yenny Constanza Ospina Estrada, Farley Alfonso Agudelo, Luz Dary Leguizamón Chingaté, Carlos González Torres, Albeiro Beltrán, Carlos Arturo González, entre otros.
Politiquero agresivo
Por la administración además del alcalde, se hicieron presentes el secretario municipal de Gobierno, un funcionario del orden departamental, la inspectora de policía, el mayor Prieto, el teniente John Zambrano, otros de civil que se dedicaron a tomar fotos. También participó el concejal Ervin Valencia Rodríguez, quien se mostró agresivo con los dirigentes acompañantes, los campesinos que se tomaron el lote y complaciente con las amenazas del alcalde. Al mejor estilo politiquero señaló: “Estoy de acuerdo con el alcalde y con ustedes”.
El acuerdo suscrito no es el ideal. Por el contrario, es muy limitado. Sin embargo, los sin vivienda dijeron estar a la expectativa para que los compromisos se cumplan. Los principales puntos plasmados en el acta de concertación son los siguientes:
1. Que la comunidad asentada participe del proceso de vivienda que se lleva a cabo en la ciudadela Ismael Perdomo de esta localidad;
2. Que el municipio disponga de un rubro de 50 millones de pesos para coadyuvar en la consecución de un lote apto para un plan de vivienda destinado para esta comunidad y hacerle el acompañamiento necesario y legal para un feliz término del proyecto;
3. Que se cree una asociación viviendista conformada por la comunidad asentada en el terreno de Invías;
4. La comunidad se compromete a desalojar pacíficamente el día 5 de febrero de 2013 dicho lote.
5. El alcalde Luis Evelio Gómez Velasco se compromete a comprar el lote con la ayuda de la misma comunidad;
6. Que los estudios técnicos sean acompañados por una comisión de la comunidad del barrio Pueblo Nuevo;
7. Se establece un lapso de 90 días calendario para realizar el proyecto técnico y la adquisición del terreno;
8. La comunidad se compromete a entregar a la alcaldía un listado completo y real de los que hacen parte del asentamiento incluidos los hijos mayores de 18, a efectos de verificar su situación real social y económica que los haga acreedores a este programa de vivienda.
Los acompañantes señalaron estar dispuestos a hacer seguimiento a esta acta de concentración para que se cumpla en su totalidad y los campesinos tengan su vivienda digna. Se habló de adquirir cuatro hectáreas de terreno en la inspección de Anaime. Lo más importante es que este núcleo permanezca unido y debidamente organizado. Es la única garantía de obtener la vivienda digna.