Parece que la población europea hubiera olvidado las desastrosas políticas del nazifascismo y, por esta razón, los partidos con esta ideología están ganando las elecciones en el viejo mundo
José Ramón Llanos H.
El partido Alternativa para Alemania, AfD, obtuvo una victoria en las elecciones regionales en Turingia, el primero de septiembre del presente año. Este partido, considerado euroescéptico cuando fue creado en el 2013, tenía posiciones radicales contra la migración, además de oponerse radicalmente a la guerra ruso-ucraniana y al apoyo a este último país. En parte, sus victorias responden a las políticas que había en la República Democrática Alemana, RDA, antes de la reunificación entre las dos Alemanias. Por otra parte, en esa región del país existe mucha desigualdad, también está afectada negativamente por una crisis demográfica.
Estos resultados sorprenden, ya que en la posguerra no se daba el triunfo de un partido de este tipo. El hecho constituye un duro revés para el canciller Olaf Scholz. Estas elecciones se dieron en medio de las tensiones producidas por el triple asesinato, con cuchillo, cometido por un sirio en Solingen, cuyo ataque produjo una conmoción en el país. Algunos tratan de reavivar el debate sobre el problema de la inmigración.
La votación obtenida por AfD
Como se sabe, Turingia está al este de Alemania. Allí los ultraderechistas obtuvieron un significativo triunfo, con 33,5 por ciento de los votos; los conservadores del Centro Democrático Unitario, CDU, solo obtuvieron un 24,3 por ciento de los sufragios. Bjorn-Hocke, uno de los líderes más radicales de su agrupación, declaró a la televisión: “Estamos listos para asumir las responsabilidades de gobierno”.
Estos resultados son sorpresivos porque desde la posguerra esta agrupación política no había podido obtener un triunfo. Por ello, uno de sus líderes exclamó “la AfD recibió un mandato claro para gobernar”. Tino Chrupalla reafirmó que la formación está dispuesta “a hablar con todos los partidos de izquierda”. Los seguidores del primer ministro regional Bodo Ramelow fueron derrotados, ya que solo obtuvieron el doce por ciento de los votos, resultados sorprendentes porque hace un lustro había obtenido un 31 por ciento de los sufragios.
La AfD obtuvo el 31,7 por ciento de los votos, seguido por la Democracia Cristiana con 31,5 por ciento. El secretario general del CDU, Carsten Linnemann, considera que su agrupación debe liderar las negociaciones para intentar formar gobierno.
Los avances del Partido de izquierda alemán, BSW
El nuevo partido alemán Por la razón y la justicia, BSW, fue fundado por Sarah Wagenknecht, militante del Partido Comunista Alemán de la antigua RDA. Logró un avance significativo, con más del diez por ciento de los votos tanto en Turingia como en Sajonia. Esta agrupación, sin lugar a dudas, será clave en las negociaciones para formar gobierno.
En alguna prensa se alcanza a leer: “Tanto AfD como BSW lograron conquistar la opinión por su discurso radical contra la inmigración”, además de oponerse a continuar apoyando a Ucrania en la guerra contra Rusia. Vale la pena destacar que estas regiones de la actual Alemania constituían la llamada República Democrática Alemana, RDA. Muchos de sus militantes y habitantes conservan su oposición contra la guerra.
Los problemas de Scholz
Estos resultados constituyen un duro revés para el gobierno de coalición de Olaf Scholz, con los verdes y los liberales del Partido Democrático Libre, FDP, ya que se está a un año de las elecciones generales del 2025. El Partido Socialdemócrata, SPD, del canciller, obtuvo entre un 6,5 y un 8,5 por ciento. De acuerdo con estos resultados, los verdes saldrían del parlamento de Turingia y los liberales del FdP tampoco tendrían representación en ninguna de las asambleas generales. Estos Estados federados tendrían que ser gobernados por alianzas poco común de grupos de derecha y de izquierda.
Es necesario destacar que los líderes de la AfD utilizaron el enojo causado por el ataque del inmigrante Solingen e inculparon a los gobiernos federales de haber propiciado un ambiente caótico. La situación se vio agravada porque el atacante parece tener relaciones con la organización Yihadista Estado Islámico, ISIS. El agravante es que él burló una orden de expulsión. Por tal razón, el gobierno de Scholz tuvo que endurecer las medidas contra el porte de armas y el control de la inmigración.
Según El País, el AfD no tendrá posibilidades de gobernar. Además, este diario destaca que Bjorn Hoche, el más radical de la formación, “obtiene el primer puesto, pero es improbable que pueda gobernar debido al cordón sanitario que aplican el resto de los partidos”.
La visión de la prensa europea
El periódico francés Le monde anunció los resultados de las elecciones en Alemania casi con igual título que el de El País de España: “En Alemania, la extrema derecha, obtiene por primera vez después de la guerra un escrutinio regional en Turingia”.
De igual manera, destaca que la AfD: “Utiliza un discurso virulento contra la inmigración y se opone a que le sigan mandando armas a Ucrania, en esta forma se beneficia de la política de la antibélica en la exRDA”.
La derrota pone en dificultades al canciller Olaf Scholz; el mismo periódico español, frente a las opiniones de Scholz, escribe: “los resultados eran amargos y sugirió a los partidos tradicionales que no hicieran alianzas con la extrema derecha para gobernar”, “La AfD está dañando a Alemania. Está debilitando la economía, dividiendo a la sociedad y arruinando la reputación de nuestro país”.
La valoración negativa y las precauciones necesarias que deben tomarse por la victoria de la AfD, están fundamentadas en las investigaciones de los servicios de inteligencia de Turingia y Sajonia, los cuales consideran esta agrupación como extremista de derecha, por tanto, deberían estar bajo estricta observación por las posibilidades de sus acciones violentas.
Fuente: Organización electoral alemana
