El entendimiento implica la confección de listas conjuntas en Madrid y en las regiones. Garzón, de Izquierda Unida ocupará el quinto lugar de la lista conjunta de Madrid, circulará con los nombres de ambas colectividades y la de los nombres de otros movimientos que se sumen a esta alianza.
Acaba de constituirse la alianza Podemos Izquierda Unida que puede cambiar radicalmente el panorama político español. Iglesias, líder de Podemos, considera que la cuestión es de un verdadero antagonismo social y económico. “Claro que es una campaña de arriba-abajo”, afirma Iglesias, “porque la realidad de España es que sigue habiendo una mayoría social que sigue padeciendo los recortes y una minoría de privilegiados con cuentas offshore”. El anunció lo hicieron Iglesias y Garzón líderes de los dos movimientos el día nueve de mayo.
El entendimiento implica la confección de listas conjuntas en Madrid y en las regiones. Garzón, de Izquierda Unida ocupará el quinto lugar de la lista conjunta de Madrid, circulará con los nombres de ambas colectividades y la de los nombres de otros movimientos que se sumen a esta alianza. Así se expresa esta cuestión en el acuerdo: “ … es una coalición electoral que firman los partidos que la integran, con sus correspondientes siglas que quedará registrada Podemos guion IU guion el resto de partidos que se sumen”.
Izquierda Unida tendrá trece candidatos en las listas, ochos diputados y cinco senadores. Actualmente IU solamente cuenta con dos disputados. Por otra parte, IU encabezará tres listas de disputados, el resto de la lista será de Podemos. La relación de los candidatos tiene en cuenta los votos obtenidos por IU y Podemos en las pasadas elecciones de diciembre, está relación se pactó de 1 a 6.
Se calcula que esta alianza obtendrá más de cinco millones de votos, los cuales les dará 58 curules. En esta cifra no se cuentan las que se obtengan en Cataluña, Galicia y Comunidad Valenciana. Los pronósticos optimistas consideran que este acuerdo da opción de acceder al gobierno a Podemos, a la Izquierda Unida y los otros movimientos regionales que se sumen a la alianza progresista signada por Pablo Iglesias y Alberto Garzón.
Este acuerdo IU Podemos fue producto de diálogos sostenidos a lo largo varios meses, requirió una sorprendente obra de filigrana política, hasta el punto que hubo que excluir cuestiones como la lucha por la república, el proceso constituyente, la OTAN y la nacionalización de empresas. Temas que no serán objeto de acción conjunta ni hacen parte del programa unitario. En todo caso la alianza progresista marca un hito que abre posibilidades de cambios radicales similares a los vividos en la era republicana española de los años treinta.