Por ahora, la aprobación o negación de la fusión está en manos de las autoridades electorales. El Comité Político anunció que el siguiente paso será la realización de la convención nacional del movimiento
Simón Palacio
@Simonhablando
La decisión política de la fusión es irreversible. Con la entrega de los documentos exigidos al Consejo Nacional Electoral, CNE, las seis fuerzas políticas del Pacto Histórico oficializaron el proceso legal para dejar de ser una coalición y así convertirse en movimiento político.
El acto fue el pasado viernes 13 de junio ante la secretaría general del CNE y contó con la participación de dirigentes y militantes de los partidos que han estado al frente de la llamada ruta unitaria del Pacto Histórico.
Aunque por ahora la aprobación o negación de la fusión está en manos de las autoridades electorales, el Comité Político anunció que el siguiente paso será la realización de la convención nacional del movimiento.
Esta noticia, fundamental para el escenario electoral que se avecina, plantea interrogantes: ¿Por qué se trata de una decisión importante para el futuro de la izquierda y el progresismo en el país? ¿Cuáles son los puntos programáticos que tienen este proceso unitario? ¿Cuáles son los principales retos y objetivos que tiene el naciente instrumento político?
Voluntad política
Entre los documentos radicados se incluyen el acuerdo de fusión, los estatutos del movimiento político, la plataforma de unidad y las actas que registran las decisiones internas adoptadas por cada colectividad fusionada.
Sobre este último punto, es importante precisar que el camino recorrido se ha caracterizado por procesos democráticos internos, donde quedó manifiesta la voluntad de fusión de los partidos políticos Colombia Humana, Partido Comunista Colombiano, Polo Democrático Alternativo y Unión Patriótica, así como de los movimientos Progresistas y Minga Social y Popular.
Para el Pacto Histórico, PH, los folios entregados acreditan que el proceso se ha dado conforme a las exigencias del sistema electoral y de partidos, respetando los estatutos internos de cada colectividad y cumpliendo con la rigurosa normativa electoral que regula este tipo de fusión de partidos políticos.
Sin embargo, distintas voces que estuvieron en la primera línea de la ruta unitaria advierten que la fusión ya no depende de la voluntad política de los partidos, sino directamente del CNE que, en recientes casos, se ha caracterizado por prolongar sus decisiones más de lo normal, tal y como ha sucedido con la no oficialización de la escisión legal de Progresistas ocurrida en la última asamblea del Movimiento Alternativo Indígena y Social, Mais, en noviembre del año pasado.
Programa
De igual forma, para discutir sobre la unidad al interior de la izquierda y el progresismo siempre será determinante el tema programático. Los pasados trágicos, los históricos disensos y consensos, los fracasos y éxitos políticos de otras experiencias, tienen como común denominador fuertes debates sobre programa político que, en muchos de los casos, responden a tensas discusiones de época.
No obstante, este momento programático del Pacto Histórico como instrumento tiene un diferencial estructural con otros procesos unitarios que otrora fueron muy importantes, como el recordado Ideario de Unidad de 2005, documento decisivo para la unificación del Polo Democrático Alternativo.
Se trata entonces del trabajo programático que se hizo en 2022 para el conjunto de la campaña electoral y que después se retroalimentó con la participación de la ciudadanía en los 51 diálogos regionales vinculantes, que terminaron estructurando el actual Plan Nacional de Desarrollo ‘Colombia, potencia de la vida’. Es decir, en esta oportunidad, la discusión no se da desde la oposición política, sino, todo lo contrario, en medio de las experiencias, dificultades y enseñanzas que dejan el inédito ejercicio de ser un partido de gobierno.
Por ello, la formalización del PH estuvo acompañada de líneas programáticas preliminares que, según lo previsto, serán discutidas en la convención nacional del movimiento. De acuerdo con sus vocerías, el Pacto Histórico se define como una organización democrática, pluralista, autónoma, solidaria, antiimperialista, pluriétnica y antipatriarcal.
Esto significa que las fuerzas sociales de la izquierda, alternativas y progresistas que fundan el PH tendrán inicialmente un ideario político basado en la vida, la paz, la justicia social y climática, el pluralismo, la soberanía nacional, la democratización económica, la garantía de derechos individuales y colectivos, y el respeto a la diversidad sexual, de género, étnica y cultural.
Objetivos y retos
Una reciente encuesta hecha por Cifras & Conceptos concluyó que el Pacto Histórico es la colectividad política que más afinidad partidaria despierta en la ciudadanía, coincidiendo con la representatividad que tiene el movimiento en el Senado de la República y la Cámara de Representantes. Estos datos perfilan en la actualidad al movimiento como el partido de Gobierno más reconocido y la primera fuerza política del país.
En consecuencia, el principal objetivo del PH es sin duda la victoria electoral en marzo y mayo del próximo año. Pero para lograrlo, el movimiento ya anunció que la tarea inmediata será reglamentar la consulta popular del próximo 26 de octubre para seleccionar no solo una única candidatura presidencial, sino también las listas para Senado y Cámara.
De todas formas, el PH es consciente que para lograr su meta no solo es importante convocar a otros sectores democráticos en la construcción de una gran convergencia, que tiene nombre y apellido, Frente Amplio, sino también a la ciudadanía común y corriente que se identifica con el Gobierno nacional, pero que no milita en ningún partido.
En medio de los recientes y complejos acontecimientos políticos del país, la convocatoria final al pueblo colombiano es a construir, de manera colectiva, un país que garantice la vida digna, profundizando con decisión el camino del cambio político.