El propósito es contribuir a la formación de las subjetividades y al quehacer político de las organizaciones sociales, con miras a fortalecer el movimiento social urbano en la ciudad de Bogotá.
Milena Hernández
Durante el segundo semestre del 2014 se desarrolló la Escuela Cívica Popular entre Corpeis y la Universidad Pedagógica Nacional, contando con cerca de 25 participantes de diferentes organizaciones sociales. Esta experiencia piloto arrojó grandes aprendizajes para la cualificación de nuestro quehacer y sirvió de marco para el I Encuentro de organizaciones sociales con énfasis territorial, desarrollado en el mes de octubre en la UPN.
La segunda versión de la Escuela inició el 9 de mayo del presente año, bajo el nombre de Escuela de Educación Popular Paulo Freire. El propósito es contribuir a la formación de las subjetividades y al quehacer político de las organizaciones sociales, con miras a fortalecer el movimiento social urbano en la ciudad de Bogotá.
Como su nombre lo indica, la Escuela está sustentada en los fundamentos políticos pedagógicos de la educación popular y la praxis política, siendo la acción- reflexión-acción el eje trasversal. Para esta versión contamos con participantes de Unidad de Procesos Populares, Marcha Patriótica Bogotá, Red Acción, Recrearte, Colectivo Blanca Villamil, Aitue, Cenaprov, UP, JUCO, PCC, entre otras organizaciones.
Asimismo, la Escuela tiene como criterios:
1. Un horizonte educativo que aporte a la trasformación social y la desnaturalización del orden vigente.
2. Promover relaciones alternativas a las relaciones de poder entre docentes-estudiantes que son propias de la educación tradicional. En consecuencia, se acude a metodologías participativas como el diálogo de saberes, el intercambio cultural y la mística en cada taller.
3. Abordar los tres campos del aprendizaje: el cognitivo, que busca profundizar la comprensión intelectual de la realidad social; el investigativo que, junto a las comunidades, apunta a la producción de conocimiento para la trasformación; y el ético político, que busca potenciar valores y prácticas como la solidaridad, la hermandad, la resistencia frente al consumismo, entre otras, como pilares de hombres y mujeres nuevas
4. Profundizar la formación en la praxis, es decir acción-reflexión-acción.Por esto se vincula el trabajo de campo territorial como condición fundamental para su desarrollo, alternando así entre el trabajo de campo y el taller en el aula.
5. Desarrollar curricularmente tres ejes trasversales: educación para la emancipación, fundamentos teóricos de las ciencias sociales e investigación social.