Anoche, a las nueve, fue víctima de un atentado criminal contra su vida nuestro compañero Rubén Morrón, cuando se dirigía a su casa en la ciudad de Barranquilla. Morrón es dirigente de Sintramienergética en Chiriguaná, trabajador de la transnacional Drummond Ltd. e integrante de la comisión negociadora del pliego de peticiones presentado por el sindicato a dicha empresa. Afortunadamente nuestro compañero salió ileso de este cobarde atentado, pese a que le dispararon en varias oportunidades, dejando varios impactos en el taxi donde se movilizaba y en el lugar de los hechos.
Como es sabido por la opinión pública y el movimiento sindical y popular tanto nacional como internacional, desde el año pasado y lo que ha trascurrido del presente se han presentado innumerables amenazas, atentados y asesinatos contra la dirigencia sindical, popular y defensores de derechos humanos, bajo el silencio cómplice del gobierno y los órganos de control del Estado y en medio de operativos militares y policiales en todo el territorio nacional.
Sin embargo, y con el creciente estado de terror impuesto por grupos de extrema derecha contra el sindicalismo, el Ministerio del Interior y su Unidad Nacional de Protección (UNP) manifiestan que los estudios de riesgo hechos a los dirigentes sindicales da ordinario y por lo tanto no amerita colocarles esquemas de protección, y eso mismo sostiene el gobierno en las conferencias de la OIT, de donde los han excluido de la lista de países “que más violan los derechos humanos”.
Por lo visto ni a la OIT ni a otros entes internacionales como la ONU les importa la vida ni los derechos de los trabajadores colombianos, a quienes nos han asesinado en los últimos 25 años a mas de cinco mil activistas y dirigentes sindicales, donde se ilegalizan las pocas huelgas que hacemos y se violan los más elementales derechos laborales y humanos.
Solo los pueblos salvan a los pueblos y los trabajadores se salvan a sí mismos. Por lo tanto les pedimos que nos brinden su más valiosa solidaridad, tanto moral enviando sus pronunciamientos de rechazo a la orgía de sangre que avergüenza a Colombia, como presencial para darnos aliento de seguir enfrentando este sistema capitalista cruel y criminal que enluta a la humanidad.
Fraternalmente,
Comité Ejecutivo-Funtraenergética-FSM