Nelson Fajardo
Según la Comisión Económica Para América Latina (CEPAL), en un Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2013, el Producto Interno Bruto (PIB) es de 5 billones 702.925 millones de dólares corrientes y creció el 3.1 por ciento en 2012. Para el 2013, las cifras no serán mejores y bajará a 3.0 por ciento. Igualmente, un Documento Informativo de la misma institución de 2010, informa que la inversión social de América Latinas y el Caribe sobre el PIB, por países, oscila entre el 5 y 15 por ciento; lo que en el límite más alto daría cerca 680 dólares anuales de base año 2000, por persona. Esto para una población de 609 millones 686 mil personas, por proyecciones a junio de 2013, de los cuales 167 millones –27.4 por ciento son pobres-según el Anuario Estadístico 2012 cepalino, con una esperanza de vida entre 2010 y 2015, para hombres de 71.6 años y para mujeres de 77.8 años.
Dichos datos, según los mismos informes, pertenecen a una región con una Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF) del 22.8 por ciento a 2012, una inversión extranjera de 125.662 millones de dólares, unas reservas internacionales que llegan a 826.336 millones de dólares y una deuda externa (DE) de 1 billón 191.057 millones de dólares; de los cuales, la deuda pública o estatal hace el 50.2 por ciento del PIB. Es decir que debemos a los países ricos, la bobadita de 2 billones 852.425 millones de dólares, aproximadamente. Por su parte, la inflación pasará del 6.1 por ciento en 2012 a 6.6 por ciento proyectado a 2013, un desempleo del 6.4 por ciento el año anterior y un 55.8 por ciento de ocupados sobre la población económicamente activa (PEA), indica la mencionada institución.
Estos datos señalan que del PIB registrado al año pasado, el per cápita sobre el total de la población fue de 9 millones 360 mil dólares; de los cuales, debemos pagar por deuda 4.695.643 dólares y nos queda 4.664.357 dólares. Si a este restante, le disminuimos el 6.1 por ciento de la inflación 2012, tenemos 4.379.831 dólares, menos la inversión extranjera, da 4.379.830 dólares; restemos la FBCF de 1.300.267 dólares; queda 3.079.563 dólares, menos las reservas internacionales, resultan 3.079.561 millones. Si 21.461.000 personas sobre el total de la población ocupada son desempleados, baja el monto a 3.079.295 dólares. Finalmente, si a este último monto, le restamos el 15 por ciento máximo del intervalo del gasto social sobre el PIB, tenemos 3.079.294 dólares. Total que al restar la ganancia de los capitales, los impuestos al Estado y las transacciones en la balanza de pagos, deja un ingreso neto a un trabajador latinoamericano de 20 a 1000 dólares mensuales y 57 dólares para inversión social. Juzgue usted: ¿Cuál democracia?… ¡Económica!
