Diseñó una metodología para el estudio de la clase obrera que, partiendo de la contabilización anual de los conflictos y la sistematización de sus elementos principales, establecía ciclos en la lucha proletaria
Grupo de Investigación Histórica CEIS
La semana pasada falleció Álvaro Delgado Guzmán, una figura reconocida en el movimiento popular por sus estudios sobre las luchas obreras y los movimientos sociales. Fue integrante del Partido Comunista Colombiano por cuatro décadas, durante las que trabajó activamente en el semanario VOZ.
Delgado, quien dejó el PCC en 1992 –una época de persecución y crisis de la organización– adquirió cierta notoriedad en años recientes por el libro de memorias Todo tiempo pasado fue peor. El texto se elaboró a partir de entrevistas concedidas al sociólogo Juan Carlos Célis, en las que pasaba revista a su vida militante de manera visceral y con sentimientos represados; algunos de sus pasajes fueron usados de manera recurrente por José Obdulio Gaviria en sus monólogos anticomunistas y sus mezquinos ataques a la familia Cepeda Castro.
Más allá de las diferencias y discusiones, queremos recordar los aportes de Delgado como periodista e investigador del movimiento obrero colombiano.
Revolucionario profesional
A finales de la década de 1940, Álvaro Delgado se integró en Popayán, su ciudad natal, a un círculo de las Juventudes Democráticas, la estructura juvenil creada durante épocas de Augusto Durán. Allí confluyó con Manuel Cepeda y Álvaro Mosquera.
En 1952 Delgado asistió como delegado al Congreso fundacional de la Unión de Juventudes Comunistas de Colombia, la organización que dio vida a la actual JUCO, y allí se afilió formalmente a la organización comunista. Tras estudiar un tiempo arquitectura en la Universidad Nacional, se trasladó a Medellín y se implicó de lleno en las actividades del Partido.
En la capital antioqueña, por iniciativa del PCC en la región, se le encargó la preparación de los materiales de Los Inconformes para su publicación, pero por diferencias con Ignacio Torres Giraldo sobre asuntos de forma, estos nunca fueron publicados bajo ningún sello editorial partidario.
Como “militante profesional”, Delgado fue asesor parlamentario, investigador del Centro de Estudios e Investigaciones Sociales, CEIS, periodista y administrador del semanario VOZ, e incluso llegó a vivir en Praga donde trabajó en dos ocasiones como redactor de la Revista Internacional, publicación de la Oficina de Información de los Partidos Comunistas y Obreros.
Movimiento obrero y huelgas
Pero fue como periodista e investigador que Delgado realizó su trabajo de mayor impacto, analizando el movimiento sindical y las luchas obreras. Delgado estaba encargo de la página laboral del periódico, y entre 1961 y 1962, por encargo del Partido, comenzó una cobertura sistemática del movimiento sindical.
De esta forma, Delgado accedió a información de primera mano sobre las huelgas y la vida de los sindicatos que le permitía realizar análisis coyunturales que aparecían periódicamente en VOZ y en la revista Documentos Políticos.
Pero el trabajo trascendió lo coyuntural, y ordenando la información recopilada durante años, Delgado comenzó a estudiar el desarrollo del movimiento obrero partiendo de la sistematización de las huelgas y protestas proletarias durante periodos de tiempo relativamente largos. El primer resultado de este trabajo fue Doce años de luchas obreras, que apareció en 1975 como separata de la revista del CEIS Estudios Marxistas.
En este trabajo Delgado inició una metodología para el estudio de la clase obrera donde, partiendo de la contabilización anual de los conflictos y la sistematización de sus elementos principales, se establecían ciclos en la lucha proletaria.
Desde entonces, Delgado mantuvo actualizados los datos sobre huelgas, y cuando dejó el Partido en 1992, llevó las bases de datos producidas durante sus años como investigador del CEIS al Centro de Investigación y Educación Popular, CINEP, dándole continuidad a sus investigaciones. Esta metodología fue asumida por la academia colombiana y sigue siendo una forma recurrente para estudiar no solo las luchas obreras, sino la movilización social en general.







