Este departamento ha sido víctima del conflicto armado y del olvido estatal. Por tal razón, sus liderazgos se caracterizan por su inquebrantable lucha en pro del bienestar de su población
Valentina Bolaño Senior
@Vale_BoSe
El Chocó es uno de los departamentos más afectados por el conflicto armado, así como víctima del olvido de anteriores gobiernos en materia de economía, paz y educación.
Sus luchas y liderazgos sociales se distinguen por la valentía e incansable búsqueda de un mejor departamento, basado en el respeto a los derechos humanos, así como el acceso a la educación y a la vida laboral para los y las jóvenes.
Hermencia Palacios Palacios es un claro ejemplo de líder sindical y social. Su defensa por los derechos humanos y laborales comenzó en 1974. Tras una asamblea del Sindicato de Empleados y Trabajadores de la Educación, Sintrenal nacional, inició su militancia en el Partido Comunista Colombiano.
Cuenta con una destacada trayectoria sindicalista: presidenta de Sintrenal Seccional Chocó y presidenta de la subdirectiva de la Central Unitaria de Trabajadores en el Chocó, esta última aglutina a todos los sindicatos del departamento.
Además, desde el 2006 hasta el 2024, fue integrante de la Junta directiva del Sindicato de la Unión de Maestros del Chocó. Asimismo, es parte del Comité Ejecutivo del Partido Comunista en el Chocó.
VOZ habló con Hermencia Palacios sobre su vida en la lucha sindical, los derechos humanos en el departamento y su economía.

El Chocó ha sido una región de lucha por la defensa del territorio. ¿Cómo ha sido la historia de los memorables paros cívicos?
En la mayoría de los paros cívicos, el Partido Comunista y la Unión Patriótica han jugado un papel fundamental en la consolidación y lucha por los derechos. Un ejemplo fue en 1987, cuando visitábamos los barrios en Quibdó para socializar la propuesta de irnos a paro, como estaba pasando en varias partes del país. Estuvimos en la comisión negociadora y la mayoría éramos del Partido.
En ese paro conseguimos la construcción de la vía al mar, interconexión eléctrica, construcción del puente de Yuto, construcción de la ciudadela universitaria. Esto demuestra que el Chocó ha avanzado gracias a sus luchas. En estas, siempre ha estado inmerso el Partido.
La resistencia chocoana
Desde estos paros hasta la actualidad, ¿cómo se encuentra la situación de los derechos humanos en el Chocó?
El desplazamiento forzado se profundiza por la situación del conflicto social y armado en casi todos los municipios del departamento, sin embargo, siempre ha sido constante, esto no es de ahora.
Muchas personas dicen que se ha recrudecido el conflicto armado en Chocó, pero, este conflicto siempre ha estado.
Es necesario recordar lo de Bojayá, tantas personas que murieron, cuando nosotros ya lo habíamos advertido junto con la Diócesis de Quibdó.
¿Cómo lo advirtieron?
Hicimos una reunión con el gobernador del Chocó en su momento, en la cual anunciamos lo que podía pasar si el Gobierno nacional y el gobierno departamental no tomaban medidas sobre lo que estaba pasando, pero no hicieron nada, y pasó el triste capítulo de Bojayá.
Actualmente, el conflicto en el departamento se intensifica por los intereses económicos y de territorio, sabemos que se quieren apoderar de nuestras tierras.
En este momento, están solicitando un acuerdo humanitario…
Sí, un acuerdo humanitario por nuestros jóvenes, quienes están siendo asesinados en Quibdó.
Entre 2016 y 2024, se han registrado aproximadamente 480 homicidios de jóvenes, con edades entre 13 y 28 años. Ante esta grave situación, los diferentes procesos organizativos como el Foro Interétnico, el Consejo Departamental de Paz y derechos humanos, el Comité Cívico por la salvación del Chocó, el Comité de Impulso a garantía de líderes y lideresas sociales, el Colectivo de Mujeres, entre otros, han realizado importantes movilizaciones contra todo tipo de violencia, feminicidios.
Estas organizaciones han alzado sus voces exigiendo el cese de la guerra, la consolidación del acuerdo humanitario, el cumplimiento de los Acuerdos de los Paros Cívicos y de otros sectores sociales, y mejores condiciones de vida y de trabajo para los jóvenes y la población en su conjunto.
Siempre será nuestro compromiso formar a las futuras generaciones de nuestro territorio en una cultura de paz y respeto por los derechos humanos.
La paz
En este Gobierno nacional, ¿cómo ha estado la paz en el territorio?
El Gobierno viene haciendo esfuerzos en el Chocó, existe una comisión que se encarga de dialogar con los grupos armados que se han formado, para acabar con la violencia en la capital del departamento.
En Quibdó se vive algo especial, con reuniones entre la comisión del alto Gobierno, los líderes sociales, representantes a la Cámara, senadores y población civil. Se ha trabajado arduamente, pero el camino es difícil, ya que existen fuerzas que no permiten que la paz esté en los territorios.
Es muy importante mencionar que la Paz Total no debe considerarse un fracaso. Es una política implementada por el Gobierno con el fin de lograr la consolidación de la paz en el futuro. Son más de 200 años de un conflicto social y armado en el país. Entonces, esperamos seguir trabajando en torno a la paz, seguir reactivando la economía del territorio y del país.
¿Cómo va la economía del departamento?
La veo desde la perspectiva de la búsqueda de la paz, ya que, cuando hay paz, hay desarrollo económico. Esto se logra a través de la producción agrícola, permitiendo a las personas del campo puedan cultivar y sacar sus productos, garantizando así su soberanía y seguridad alimentaria.
Igualmente, la creación de pequeñas empresas, asociaciones y desarrollo de empleos con salarios dignos. A esto debe apostar la paz, al campo, al pueblo y a los jóvenes.
En el Chocó, los pequeños productores presentan sus proyectos a nivel nacional e internacional, han podido desarrollarlos. Un ejemplo son los productos autóctonos que están siendo comercializados en todo el país, lo que contribuye a reactivar la economía del departamento. Vamos por buen camino.