Ante la decisión de varios trabajadores de Productos Alimenticios La Victoria de afiliarse a Sintraimagra y del sindicato de presentar petitorio, se profundizó la persecución por parte de la administración.
No dar la dotación de ley, no pagar horas extras pero hacer trabajar jornadas adicionales, no dar elementos de seguridad y protección para las labores, sacar a vacaciones y no pagar, no dejar salir a comprar alimentos sino que dentro de la empresa la administración los vende y hasta no permitirle ir al baño a los trabajadores, son algunos de los abusos de la empresa Productos Alimenticios La Victoria.
Ante la decisión de varios trabajadores de esta empresa de afiliarse a Sintraimagra y del sindicato de presentar petitorio, se profundizó la persecución por parte de la administración.
“Hoy la empresa, con tal de acabar el sindicato, le viene ofreciendo dádivas a los trabajadores, cuando nunca los ha tenido en cuenta para nada, solo se ha dedicado a explotarlos y a negarles sus derechos; por eso es que ya los trabajadores no confían en la empresa y solo esperan que se inicie el proceso de negociación para reclamar sus derechos”, explica Sintraimagra, seccional Bucaramanga.
Según los sindicalizados, a pesar de las campañas que a diario pregona el gobierno a través de los medios de comunicación haciendo ver que dan garantías para el libre derecho de asociación sindical, la realidad es otra. “El gobierno, a través de sus entes de control, no hace nada, como en este caso que solicitamos una inspección ocular al Ministerio del Trabajo para verificar todas las violaciones de la empresa y hasta la fecha no se ha dado”.
Los trabajadores también denuncian que la empresa funciona dentro del área metropolitana de Bucaramanga y está ubicada en una zona residencial, por lo que hay muchas quejas de la comunidad por los malos olores, contaminación, violación del espacio público y ruido.
