La acción criminal fue cometida bajo banderas de diversas fuerzas políticas, incluida el partido Svoboda (Libertad)
El primer ministro de Ucrania, Arseniy Yatseniuk, calificó hoy de bandidos a los autores de la muerte del policía Igor Debrin, quien perdió la vida en el enfrentamiento a manifestantes ante la sede del Parlamento unicameral.
Al expresar las condolencias a la familia del fallecido, Yateseniuk insistió en que son «bandidos» los ultranacionalistas que protestaron contra un proyecto de reforma en la Constitución, aprobado hoy en primera lectura por 265 votos de 226 requeridos como mínimo.
Dichas fuerzas políticas no vinieron a defender la Constitución sino a violarla, y bajo las consignas de patriotismo y amor a Ucrania destruyen la condición de Estado ucraniano, enfatizó el gobernante llegado al poder el 22 de febrero de 2014 tras revueltas similares.
Exigió como castigo cadena perpetua para quien lanzó una granada de combate contra el destacamento que custodiaba la Suprema Rada (Parlamento), y recalcó que la acción criminal fue cometida bajo banderas de diversas fuerzas políticas, incluida el partido Svoboda (Libertad).
Arsen Abakov, ministro de Interior, dijo que las heridas sufridas por cerca de 90 personas son responsabilidad de quienes llevaron al tirador de la granada ese lugar y deben responder políticamente por lo sucedido.
En el bando contrario, el líder de la fracción parlamentaria «Autoayuda», Oleg Bereziuk, exigió la renuncia de los jefes del Ministerio de Interior y del Servicio de Seguridad de Ucrania.
Autoayuda es uno de los partidos que rechaza los cambios constitucionales por el supuesto otorgamiento de un estatus especial al Dombás, región del sureste que no reconoció a las autoridades tras el golpe de Estado en Kiev.
En el citado proyecto, uno de los puntos especifica que las particularidades de «un autogobierno en las regiones de Donetsk y Lugansk se determinan por una ley independiente».
La cartera de Interior informó que fue detenido el presunto autor del lanzamiento de la granada contra los agentes del orden, y es un miembro de la ultranacionalista Unión Panucraniana «Libertad».
Esta agrupación, por su parte, sostuvo en un comunicado que toda la responsabilidad por el acto terrorista frente al Parlamento recae en las actuales autoridades ucranianas por propiciar «una capitulación de hecho frente al Kremlin».
La cuestión sobre un estatus especial para el Dombás, como parte inseparable de las reformas constitucionales, centra el complejo de medidas aprobado en los acuerdos de Minsk, el 12 de febrero último, en procura de un arreglo político al conflicto ucraniano.
Sin embargo, el comisionado en las negociaciones del Grupo de Contacto por la proclamada República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, comentó que el citado proyecto, en especial la cuestión de la descentralización, «tiene muy poco en común con las reformas contempladas en los acuerdos de Minsk-2».
