El congresista Iván Cepeda pidió al Estado colombiano una rendición de cuentas por la grave sequía que afecta al departamento del Casanare.
El 3 de abril pasado, el representante a la Cámara por el Polo y senador electo pidió a seis instituciones del Estado explicar las medidas de control tomadas para evitar “la problemática ecológica que actualmente afronta el departamento”.
Cepeda solicitó información a entidades como la Procuraduría General, la Defensoría del Pueblo, la Contraloría y el Ministerio de Ambiente, a las que solicitó reportar sus medidas frente a esta crisis ambiental, que ha ocasionado la muerte de miles de animales.
En el requerimiento, Cepeda preguntó a dichas instituciones “si existen diagnósticos concretos sobre las causas de la catástrofe”, y pidió que le expliquen al país “la magnitud de la crisis” y los planes que implementarán para mitigar el daño ocasionado.
Además, solicitó “informar sobre las actividades de las distintas empresas mineras y del sector agropecuario que pudieron generar dicha crisis”.
Las causas
El Casanare afronta desde hace varios meses una grave situación ambiental generada por una larga sequía que ha dejado más de 20.000 animales muertos (principalmente chigüiros y reses). Varios municipios han estado sin agua potable.
“Un desastre de estas dimensiones no puede terminar en un silencio oficial y en una pasividad que desemboque en nuevas situaciones de destrucción del ambiente y la fauna”, dijo Cepeda.
Han sido varias las explicaciones sobre los causantes de esta crisis. Según un estudio del Instituto Geográfico Agustín Codazzi, la “tragedia ambiental” en Casanare pudo desatarse por factores como la extensión de cultivos hacia la zona del páramo del Cocuy, la ganadería en exceso, la poca retención de agua del suelo, la actividad petrolera y las características de los suelos.
