En marzo de 1990 y por acuerdo del Buró de la FDIM, celebrado en Berlín en febrero de ese mismo año, se creó el Organismo Regional de Coordinación de la FDIM para América y el Caribe (Oficina Regional), de la capacitación, con el pleno apoyo de Cuba y la Federación de Mujeres Cubanas
Ana Elsa Rojas Rey
La Oficina Regional de la Federación Democrática Internacional de Mujeres (FDIM), tiene sus antecedentes en el Centro Regional, que se constituyó en La Habana en la década del setenta, con el propósito fundamental de ampliar y sistematizar la capacitación y preparación de cuadros nacionales de organizaciones afiliadas de la región de América Latina.
Cientos de lideresas de muchos países de la región pasaron por esta instalación que devino escuela de formación y entrenamiento para cuadros, a la vez que constituyó importante vía para el intercambio de experiencia con dirigentes de base y de las instancias intermedias de dirección de la Federación de Mujeres Cubanas. Conocieron los logros de la Revolución Cubana y la integración a ella de las mujeres como objeto y sujeto de los programas económicos, políticos y sociales.
En marzo de 1990 y por acuerdo del Buró de la FDIM, celebrado en Berlín en febrero de ese mismo año, se creó el Organismo Regional de Coordinación de la FDIM para América y el Caribe (Oficina Regional), de la capacitación, con el pleno apoyo de Cuba y la Federación de Mujeres Cubanas sustituyendo al Centro de Regional y ampliando los contenidos y objetivos, más allá, organización que coordina en la región la actividad de la FDIM.
Oficina regional
La Oficina Regional ha jugado un papel importante en el crecimiento, la renovación de métodos y formas de trabajo, en la creciente participación e influencia en los espacios continentales y mundiales de lucha contra el orden económico, político y social existente, contra las actuales formas de expresión y dominación del imperialismo.
En la actualidad hay 62 organizaciones afiliadas de 29 países de América y el Caribe.
Hasta la fecha se han realizado cinco conferencias regionales:
I Conferencia, Brasil, 1992; II Conferencia, Mar del Plata, Argentina, 1994; III Conferencia, México, 1999; IV Conferencia, Venezuela, 2004; V Conferencia, Venezuela, 2008; VI Conferencia, El Salvador, 2015.
La Federación de Mujeres Cubanas, comenzó a gestarse en los primeros meses de 1959, tras el triunfo revolucionario del 1 de enero y se constituyó oficialmente el 23 de agosto de 1960.
Vilma Espín
La Presidenta desde su constitución fue Vilma Espín Guillois, destacada dirigente política de la Revolución Cubana, quien participó activamente como miembro del Movimiento 26 de Julio. Participó en la lucha contra la dictadura de Batista, muy activa en la coordinación del movimiento clandestino de Oriente. En 1958 se sumó al Ejército Rebelde y formó parte del II Frente Oriental Frank País. Fue miembro del Comité Central del Partido y fue diputada al parlamento cubano e integrante del Consejo de Estado. Fue la encargada de reorganizar las diferentes organizaciones femeninas, de donde nació la Federación de Mujeres Cubanas, para hacer ellas mismas, la Revolución que garantizaba la justicia social y la dignidad plena para todas y todos en Cuba.
Esta organización reúne a más de cuatro millones de mujeres de todos los sectores sociales, que constituyen el 90.0% de las cubanas mayores de 14 años. Desde 1997 ostenta estatuto consultivo como ONG ante Ecosoc.
Es propiciadora de la introducción de los asuntos relacionados con el género en la agenda pública e institucional, junto al proceso de crecimiento individual de sus integrantes y de la propia organización, cuya labor ha sido decisiva para comprender que en Cuba el punto de partida para desencadenar el proceso de lucha por el pleno ejercicio de la igualdad de derechos y oportunidades ha residido en la concepción teórico política acerca de la situación y condición de la mujer como un problema fundamental de la sociedad y de ahí su inclusión como una de las estrategias fundamentales del profundo proyecto de la Revolución, que se ha trazado como objetivos fundamentales:
• Defender la Revolución cubana que ha hecho y hace posible nuestras conquistas.
• Luchar por la plena incorporación, participación y promoción de la mujer en la vida económica, política, social y cultural del país en condiciones de igualdad de derechos y oportunidades.
• Lograr las necesarias transformaciones y fortalecimiento de la familia que propicie en todos sus integrantes el ejercicio consciente de sus responsabilidades y promueva las relaciones democráticas en su seno.
• Fortalecer el trabajo político ideológico y la formación de valores éticos y morales en los hijos, la familia, la escuela y la sociedad.
• Intensificar el desarrollo de una educación no sexista en la familia, la escuela y en la sociedad, apoyando los planes de una educación sexual responsable en las mismas.
• Difundir en todos los ámbitos de la sociedad cubana la perspectiva de género como instrumento para el análisis, la planificación y proyecciones económicas y sociales del país.
Fuentes: Organización de Mujeres Salvadoreñas las Melídas.
FDIM Brasil, oficina Regional América y Asodemuc Colombia.
