Bogotá tiene veinte localidades y en todas está prevista la visita de Aída Avella y el equipo de candidatos que la acompaña.
Redacción Política
Un sol radiante acompañó a los jóvenes caminantes en pleno corazón de Bogotá. Tambores, redoblantes y camisetas amarillas adornaban sus consignas. La misión: presentar la propuesta de la Unión Patriótica para Bogotá. Su compromiso: no agotar ningún esfuerzo para darle la vuelta a los barrios de las localidades. Así como sucedió en La Candelaria, las banderas de la UP ondearon a lo largo de las localidades de Teusaquillo, Kennedy, Puente Aranda, Fontibón, Bosa, Engativá y Ciudad Bolívar.
“La UP está en las calles haciéndose sentir”, es una de las composiciones de los jóvenes patriotas para los recorridos. Los unos cantan y hacen música, mientras cada candidato a los edilatos de las localidades presenta su propuesta programática y las ideas de la UP para la ciudad a cada vecino, amigo o desconocido que de manera desprevenida se le acerca. Los demás, sin ser candidatos, hacen lo mismo.
Bogotá tiene veinte localidades y en todas está prevista la visita de Aída Avella y el equipo de candidatos que la acompaña. Román Vega, médico y especialista en temas urbanos, Alfonso Castillo, defensor de derechos humanos, Natalia Moreno dirigente social, Martha Bolívar, experta en temas de urbanismo, Guillermo Pérez dirigente de sectores populares en varias localidades, entre otros, son apenas una muestra de la lista que se conformó.
No es difícil identificar a la UP en la calle. Un contingente de jóvenes, la nueva generación de la UP, que siempre se hace sentir. Cantan, ríen, hacen puestas en escena que explican la propuesta de la UP, preparan y comparten canelazos con los vecinos o instalan una carpa en el Par way del barrio La Soledad en Teusaquillo, para explicar los puntos de su programa. La paz está en el primer orden, pero también los temas más sentidos de los ciudadanos, las rutas del SITP, la atención de los ciudadanos en hospitales públicos, la jornada continua en los colegios del distrito, la cátedra de historia para el pénsum académico de Bogotá, el tema ambiental y la defensa del páramo del Sumapaz que se le pretende entregar a las multinacionales mineras, son algunos de los temas de conversación con los ciudadanos.
“Desde el edilato se hacen cosas con la condición de tener una bancada de concejales que respalden las iniciativas y una alcaldía de la izquierda que ejecute las soluciones que los ciudadanos proponen. Por eso pedimos el voto en combo, es decir que en los tres tarjetones marque el logo de la UP”, le explica un joven de la UJP a un vecino de La Candelaria.
Por su parte la candidata al Concejo de Bogotá Aída Avella, dice: “la nuestra es una lista con una combinación perfecta entre las nuevas generaciones de políticos y algunos que estamos de salida porque la UP se ha caracterizado por tener ideas frescas y realizables; por eso estamos en esta campaña”. “Para la gobernabilidad del país se debe tener muy claro de qué lado se está: del lado de la defensa del agua y la vida o del lado de los intereses de las multinacionales mineras que ya le pusieron el ojo a los recursos naturales de la ciudad. Usted elige”, complementa la candidata Avella.
Así son todos los días en estos últimos meses de intensa campaña por Bogotá. La UP se prepara para asistir a un debate desigual, porque mientras presenta su propuesta se conoce de la ausencia de garantías en las regiones donde la presencia paramilitar se ha incrementado y está iniciando su actuar contra los líderes de la colectividad. Los casos en el departamento del Cauca parecen la cuota inicial de ello.
La UP tiene una agenda de visitas y recorridos en las localidades y a ellos Aída Avella, invita a que se sumen. “Nos vemos en las calles porque es allí donde nuestra propuesta se fortalece y es por los ciudadanos que nuestro proyecto político tiene sentido”.
