El fascismo
El fascismo es lo más parecido a una bestia de los infiernos. Colombia tiene un nivel de comprensión muy leve, y nunca van a creer que quien un día reza y llora con camándula en mano, al siguiente día es capaz de ordenar un holocausto, y así mismo, la memoria colectiva casi todos los días se actualiza dejando en el olvido cosas y hechos que están conectados unos a otros, y así las gentes no reaccionan nunca, y de esa manera sin capacidad de réplica y reacción es más fácil someter y dominar al pueblo mismo. Jaime Alberto (vía Internet).
Revocatoria a togados
El gravísimo problema de la Justicia colombiana radica en que sus integrantes, en su mayoría, poseen el don de la corrupción ubicua y es en la cima de la pirámide el engendro del mal. La dignidad de la Justicia no puede soportar la menor levedad de corrupción y menos en las altas cortes donde se presume el máximo grado de honestidad y paradigma de transparencia. Los recurrentes escándalos de las altas cortes tienen sin piso jurídico al establecimiento. Al igual que los privilegiados del poder no tienen jueces que los investiguen, acusen y condenen, pues la insustancial y descompuesta Comisión de Acusaciones es otro monstruo de la corrupción del país.
El 57% de las 1.227 denuncias que tiene la Comisión son contra magistrados de las altas cortes. Allí reposan y sucumben por arte de impunidad. La Fiscalía, Procuraduría, Personería y Defensoría del Pueblo miran para sus intereses, demeritando la justicia y el control político. Menos mal hay algunos medios de comunicación que denuncian y ponen al ciudadano en conocimiento de los desastres judiciales del país. Es urgente desmontar de una u otra manera la rampante corrupción no solo en la Justicia sino en el ámbito nacional.
Para tan indignante mal hay que utilizar una figura fuerte aunque sea llamada golpista: la revocatoria. Suprimirle a las cortes las facultades de postular y elegir Procurador, Registrador, Contralor y Fiscal. La meritocracia debería ser la forma de elección de los magistrados, donde excelentes conductas, inteligencia, edad y trayectoria limpia, sean cualidades del elegido. Esta reforma y otras muy necesarias serán viables en la Constituyente. Ómar León Muriel Arango (vía Internet).
Escándalos en la campaña
La campaña electoral transcurre de escándalo en escándalo. De JJ Rendón, un escuálido delincuente traído a Colombia por Álvaro Uribe Vélez y ahora al servicio de la campaña reeleccionista de Juan Manuel Santos, pasamos al hacker de la campaña uribista de Óscar Iván Zuluaga, delincuente que en contubernio con la inteligencia del Ejército estaba dedicado a sabotear el proceso de paz de La Habana. No hay controversia ideológica ni debate de programas, han sido reemplazados por las ofensas y los agravios, que algunos llaman guerra sucia. Es el desprestigio total de la política que no es aprovechado por la izquierda con un gran movimiento de unidad que en estas circunstancias tendría la enorme posibilidad de triunfar. María Bueno (vía Internet).
