Trump pretende arrastrar a América Latina a la guerra

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El pueblo venezolano rechaza los planes imperiales de invasión.

Alberto Acevedo

Indignación y rechazo generalizado de un importante número de naciones, a través de sus gobiernos y de organizaciones populares y democráticas de diferente índole, provocaron las declaraciones del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, al admitir que su gobierno estaría considerando una “opción militar”, para intervenir abiertamente en Venezuela y torcer, mediante el uso de la fuerza, el destino soberano de esa nación.

En diversos foros internacionales, incluso en una instancia de las Naciones Unidas, se escucharon voces de respaldo a la gestión del presidente Nicolás Maduro y al derecho que tiene el pueblo venezolano de darse el gobierno que desee, en ejercicio del derecho a la autodeterminación de los pueblos, la soberanía nacional y a la no injerencia de potencias extranjeras en sus asuntos internos.

Como se recordará, el 12 de agosto se conoció la noticia de que el mandatario norteamericano, había dicho a medios de prensa que estaba considerando una posible acción militar contra Venezuela, en respuesta a las últimas medidas del presidente Maduro, al impulsar una Asamblea Nacional Constituyente, que a la Casa Blanca se le antoja estar destinadas a erosionar la democracia y perpetuarse en el poder.

Serena respuesta de Maduro

En su declaración, que resulta extravagante, no solo porque se lleva por delante cualquier norma del derecho internacional, sino porque se produce desde un campo de golf en New Jersey, donde pasaba días de ‘descanso’, Trump dijo que su gobierno no va a descartar una opción militar contra Venezuela. “Tenemos muchas opciones para Venezuela, incluyendo una posible opción militar, si es necesario”, dijo el mandatario.

En respuesta al tono belicoso del gobernante norteamericano, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, respondió de manera serena, haciendo una exhortación al diálogo y las conversaciones respetuosas entre iguales. “Yo creo en la diplomacia, y le ratifico al presidente Trump mi deseo de restablecer relaciones políticas, de diálogo, de respeto, en términos de igualdad”, dijo Maduro en una de sus primeras reacciones.

Sin embargo, en una declaración oficial, a través de la cancillería, el gobierno de Caracas fue más enérgico en el rechazo a una posible intervención militar norteamericana.

Contra la soberanía de Venezuela

“La República Bolivariana de Venezuela -señala la declaración- rechaza de la manera más categórica y contundente las declaraciones inamistosas y hostiles del Presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, el 11/08/2017, en las que amenazó con una intervención militar contra nuestra Patria, las cuales son a todas luces violatorias de los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y de las normas del derecho internacional, particularmente en lo que respecta al uso o amenaza del uso de la fuerza contra la independencia política de los Estados.

“Las declaraciones belicistas del Presidente Donald Trump, claramente enmarcadas dentro de las agresiones sistemáticas de la administración estadounidense contra Venezuela, representan una amenaza directa contra la paz, la estabilidad, la independencia, la unidad territorial, la soberanía y el derecho a la auto-determinación de la República Bolivariana de Venezuela, a tan sólo un día de que el Jefe de Estado y de Gobierno venezolano, Nicolás Maduro Moros, hubiese renovado su llamado a entablar relaciones de altura, igualdad y cooperación con el Gobierno de los Estados Unidos de América, sobre la base del respeto mutuo”, puntualiza el documento, fechado en Caracas el 12 de agosto.

La solidaridad con el proceso revolucionario venezolano no se ha hecho esperar, antes y después de las declaraciones de Trump. En la primera semana de agosto, los representantes de 57 naciones, participantes de la sesión de Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, con  sede en Ginebra, expresaron su respaldo al gobierno de Venezuela y a los esfuerzos de su presidente por encontrar vías pacíficas de solución a los problemas que afronta esa nación. Entre los firmantes se encuentran China, Rusia, Irán, Vietnam, Qatar, Palestina, Cuba, Bolivia, Nicaragua y República Popular y Democrática de Corea.

Amplia solidaridad

El comité ejecutivo de la Organización de Solidaridad con los pueblos de América Latina, Asia y África, Ospaal, calificó como “victoria del pueblo venezolano”, la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente. En igual sentido se pronunciaron, el Movimiento del Socialismo Allendista, de Chile, y la Coordinadora Resistir y Luchar, de Argentina.

“Condenamos el afán intervencionista de los Estados Unidos”, dijo en una declaración el presidente de Bolivia, Evo Morales. El ministro de Defensa de Venezuela, general Vladimir Padrino, calificó como “un acto de locura y supremo extremismo”, el anuncio de Trump de iniciar una aventura militar intervencionista sobre territorio latinoamericano.

Otro tanto han hecho numerosas personalidades e intelectuales del mundo. Se destacan las afirmaciones del lingüista norteamericano Noam Chomsky, quien calificó las declaraciones de Trump de “chocantes y peligrosas”. También el conocido periodista e intelectual de ese país, John Pilger aseguró que el trato de Trump hacia Venezuela es “irrespetuoso”, y sentenció: “Si Venezuela cae, la humanidad cae”.