“Hay que crear nuevas formas de lucha, de resistencia y de lenguaje para llegar a más personas. Ya sabemos que tenemos ocho millones de personas; de votantes que asumieron que es posible transitar hacia una nueva etapa”
Renata Cabrales
@RENATARELATA
A pesar de las dificultades económicas que tuvo que afrontar el Festival Internacional de Poesía de Medellín, debido a los pocos recursos que destina el gobierno colombiano para la cultura en el país, se logró la versión número 28 de este importante evento cultural.
Según el creador del festival, el poeta Fernando Rendón, quien habló para VOZ, la iniciativa nació, precisamente en un momento difícil que padecía Medellín: “el año 1991, una época de miedo y violencia que la ciudad todavía recuerda”. Luego de muchas luchas por el intento de superar la violencia y conseguir un Acuerdo de Paz entre el Gobierno de Santos y la guerrilla de las FARC, la versión 28 del festival está motivada por la idea de salvar dicho acuerdo de una ultraderecha que ha tomado fuerza y pretende devolver al país al caos de la guerra sin fin.
Afirma Rendón que “esta es una nueva versión en un momento en que el acuerdo de paz ha sido violado, la paz está en riesgo; solo recibe desprecio de parte de la oligarquía colombiana, y todo parece indicar que el nuevo gobierno quiere recuperar la senda de la guerra y violar los derechos humanos… la paz solo recibe gestos de desprecio de la llamada clase dominante de Colombia y Duque quiere recuperar la senda de la guerra”.
Nuevos lenguajes y nuevas formas de resistencia
Para el poeta, “el pueblo colombiano tiene que tener conciencia, tiene que asumir el compromiso de lo que queda de la paz que es casi nada porque los odios, en gran medida, se mantienen… hay que crear nuevas formas de lucha, de resistencia y de lenguaje para llegar a más personas. Ya sabemos que tenemos ocho millones de personas; de votantes que asumieron que es posible transitar hacia una nueva etapa”.
Asimismo, para Rendón, si hay algo que la izquierda colombiana debe entender es el inmenso valor de la poesía y el arte en general y el inmenso valor de las tradiciones culturales de los pueblos originarios que, según su experiencia, no hemos valorado lo suficiente, pues “la lucha por la tierra es imprescindible para los pueblos, pues parece que son importantes las luchas por la tierra, pero, no son menos importantes la tradiciones espirituales que tenemos que entender porque son nuestra memoria y el origen de nuestro continente”.
La poesía y las artes constituyen la verdadera esencia humana; su aspiración y su sueño natural a una vida superior, y es por eso que el director del gran festival de poesía propone crear escuelas de poesía, de filosofía y convertir la pasión por el conocimiento que ha limitado la lucha por la emancipación de Colombia en “acciones puramente exteriores que son necesarias e imprescindibles para la creación de nuestro pueblo: que el pueblo escriba, cante, que haga música, que exprese con todo su rigor, con todo su poder su sueño de libertad, de democracia; su sueño de paz”.
Asimismo: “La cultura es la única fuerza y posibilidad real que el pueblo colombiano tiene de emanciparse, de transformarse, de transformar la atmósfera adversa que se ha afincado en Colombia con el triunfo del fascismo, que parece expresarse en una dictadura constante, una constante vulneración de los derechos de la población y un desprecio por la vida”.
Los y las artistas
En el 28 Festival Internacional de Poesía de Medellín se presentaron poetas, chamanes y cantantes originarios de los cinco continentes. Entre los invitados e invitadas estuvieron la gran artista del mbira Stella Chiwese (Zimbabwe) quien impresionó con sus cantos ancestrales de la patria antigua, el poeta vietnamita Nguyễn Xuân Anh y el poeta chino Zhao Lihong, entre otros artistas no menos interesantes.
La participación de las mujeres
Margarita Tafúr, quien estuvo presente en el evento, habló con VOZ sobre la participación de dos importantes poetas: Waldina Medina hondureña y Carmen Medina, de Cuba. Manifestó que son grandes poetas cuyos trabajos artísticos tratan temáticas sobre las mujeres y la ancestralidad, principalmente.
Según esta, la obra de la cubana Carmen González, quien dirige el Festival Internacional de Poesía de Cuba, nace de “la tradición musical poética artística de su familia y viene de África, donde la tradición oral se hace cantando, todo se hace a través de la palabra, a través del gesto poético, por ejemplo, hay poemas universales que son los que interpretan los guerreros, antes, durante y después de enfrentarse a la guerra”.
