Nuevamente integrantes de Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, se ven involucrados en hechos en los que se muestra un ejercicio de violencia desproporcionada y que atenta contra la libertad de expresión y derechos a la protesta social.
El día 23 de septiembre, mientras se desarrollaba el paro de transportadores en la ciudad de Bogotá, mas puntualmente en las localidades del sur de la ciudad, a muy tempranas horas de la mañana llegó el Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, para disolver la caminata que emprendieron los conductores a fin de exigir el derecho al trabajo digno y que se frenaran los abusos policiales “quita licencias” como les llaman en Soacha, Usme y Ciudad Bolívar.
En varios videos que se rotaron por las redes sociales, se evidencia como mientras un medio local entrevistaba a uno de los manifestantes, los conductores caminaban a espaldas del Escuadrón cuando de repente los gases y las aturdidoras les abrían camino entre la gente sorprendida y asustada que de repente notaba como era atrapada por los hombres del escuadrón de la policía.
Por otro lado, más hacia el centro de la ciudad, los estudiantes de la Universidad Distrital, en la facultad de ingeniería, quienes a la par del paro desarrollaban un plantón sobre la carrera séptima con calle 40 exigiendo cuentas claras y sanciones por los hechos de corrupción que hoy tienen empantanada la imagen de la institución, hechos bajo la responsabilidad, hasta ahora señalada, de Wilmer Muñoz, ex director del Idexud, fueron víctima de un ataque igualmente desproporcionado por parte del mismo escuadrón.
“Yo acuso” gritaban los estudiantes sobre la carrera séptima, cuando el Esmad, ocupó y bloqueó la misma vía desde las 10 de la mañana, hasta largas horas de la tarde. Este hecho que fue violento, fue reportado por estudiantes y docentes, tanto de la Universidad Distrial como de la Javeriana.
La misma comunidad se preguntaba, ¿qué necesidad tenía el Esmad de ayudar a cerrar una vía principal, como lo es la carrera séptima en medio de un paro de transportadores? Y, peor aún, ¿con qué derecho dispararon gases y aturdidoras en contra de la humanidad de las personas y hacia adentro de la institución? En los vídeos que se movieron en las redes sociales, se podía observar a celadores, administrativos, docentes y estudiantes corriendo mientras a sus espaldas, el Esmad disparaba sus artefactos.
La desproporcionalidad que se observa en estas grabaciones, es tan cuestionable como los primeros videos que los transportadores del sur de la ciudad compartieron en diferentes redes. Como un copie y pegue, de una practicar brutal, sin protocolos de derechos humanos, y sin ningún ejercicio consecuente para lo que fue creada la policía, estos ataques se han vuelto consecutivos y cada vez más reprochados por la ciudadanía.