Palabras del director de VOZ, Carlos A. Lozano Guillén
Un saludo fraternal a todas y todos ustedes que hacen presencia en el escenario del 32 Festival del semanario VOZ, la verdad del pueblo.
Coincide con el 60 aniversario de VOZ, fundado el 20 de julio de 1957 con el nombre de VOZ de la Democracia por el Partido Comunista Colombiano. Se abría una posibilidad de ganar libertades democráticas tras la caída de la dictadura militar del general Gustavo Rojas Pinilla, que mantuvo en la ilegalidad y la persecución sangrienta a los comunistas. Sin embargo, las oligarquías liberal y conservadora, cerraron toda opción democrática, porque impusieron el Frente Nacional bipartidista y un régimen excluyente de 16 años que en la costumbre se prolongó como un sistema de democracia restringida y de persecución a los opositores y al movimiento social y popular.
El Partido Comunista Colombiano tenía experiencia en la circulación, inclusive clandestina, de periódicos revolucionarios. Diario Popular circuló como tres años en la época del Frente Popular en los años treinta del siglo pasado.
VOZ de la Democracia fue clausurada cuando denunció en 1963 que se urdía el Plan Lasso para atacar a las regiones de Marquetalia, Riochiquitico, El Pato y Guayabero, bastiones de la resistencia campesina contra la violencia latifundista y el terrorismo de Estado. Desde entonces apareció VOZ Proletaria que jugó un papel muy importante en la denuncia de las arbitrariedades del régimen bipartidista y alentó la lucha popular por el camino de la unidad para ganar espacios democráticos en la lucha por el poder.
En la década de los años 80 pasó a llamarse simplemente VOZ en decisión ideológica de reflejar los cambios sociales y económicos en el país y la irrupción de un sector de las capas medias en la lucha social y popular. VOZ persiste en el camino de promover las movilizaciones populares, paros cívicos y protestas de las masas del campo y la ciudad, En la perspectiva de la revolución y el socialismo se hacía indispensable acumular fuerzas y lograr conquistas democráticas y sociales. Al fin y al cabo las masas aprenden en su propia experiencia. Es la dinámica de la lucha de clases que coloca al frente la lucha por las reformas, la lucha ideológica y la lucha por el poder en articulación dialéctica.
En esa tarea estamos. Es lo que se deriva del reciente XXII Congreso del Partido Comunista Colombiano que llamó a fortalecer la lucha por el socialismo, pero sobre la base de cambiar la correlación de fuerzas en el logro de un Frente Amplio y democrático que se corresponda con la naturaleza del alcance del Acuerdo de La Habana y de lo que de él se desprende.
Pero este 60 aniversario coincide con el hecho histórico del Acuerdo de La Habana que puntualiza acuerdos sociales y políticos que el Gobierno y el Estado colombiano deben cumplir. No solo le pone punto final al conflicto armado con las FARC sino que logra importrantes conquistas y abre la posibilidad de la unidad popular para avanzar en el camino de los cambios de fondo en la vida nacional. En este sentido saludamos la realización próxima del Congreso de las FARC-EP que cumpliendo la palabra hacen el tránsito hacia una organización política después de la dejación de las armas.
Estos elementos son poderosas razones para decir que el 60 aniversario de VOZ está en el marco de una nueva situación política, de un proceso político lleno de enormes posibilidades y dificultades. VOZ estará en el centro de esos acontecimientos. Contando la historia tal y como es, en sus páginas están las crónicas de los últimos sesenta años de la historia política del país. En esa dirección asumiremos nuevos desafíos para ampliar la circulación y trabajar por un diario alternativo y revolucionario que resuma experiencia y esfuerzos diversos.
Con el apoyo de todos ustedes cumpliremos la tarea. No cejaremos en el empeño de demandar el derecho a la libertad de prensa y el fin de la persecución al semanario que pagó una alta cuota de sangre en la guerra sucia y el genocidio que se adelantó contra el Partido Comunista y la Unión Patriótica. El inolvidable Manuel Cepeda Vargas, director por muchos años y el corresponsal en Nariño Flavio Bedoya, fueron asesinados, como también administradores regionales y difusores del país en las regiones agrarias. Varios periodistas de VOZ tomaron el camino del exilio y otros permanecimos aquí en medio del acoso, las amenazas y la intimidación. Es lo que hace de VOZ un periódico heroico, como también son heroicos los dirigentes y militantes comunistas.
Por eso exigimos el cumplimiento estricto del Acuerdo Final de La Habana, el fin de la violencia paramilitar que se soporta en agentes del Estado y del establecimiento. El respeto a la vida en el entendido que llegó otro momento en la vida nacional que abre posibilidades a la lucha democrática que nos permitirá en otras condiciones trabajar por los objetivos de la revolución y el socialismo. Nos pronunciamos por los diálogos con el ELN y el EPL porque la paz es integral y convoca a todas las fuerzas insurgentes para sumar fuerzas en la nueva Colombia.