Según denuncias, los adjudicatarios no cumplían con los requisitos para merecer tierras: primero ponían la tierra a nombre de un campesino que llenase los requisitos y después lo hacían venderla.

Un equipo compuesto por Fiscalía, Dijín, Supernotariado y Agencia de Tierras investigará todas las adjudicaciones hechas por el Incoder Vichada en los últimos 11 años.
Según denuncias, los adjudicatarios no cumplían con los requisitos para merecer tierras: primero ponían la tierra a nombre de un campesino que llenase los requisitos y después lo hacían venderla.
De comprobarse las denuncias, las tierras regresarán a control del Estado. Según el superintendente de Notariado y Registro Jorge Enrique Vélez, serían no menos de 300 mil las hectáreas en entredicho.
El funcionario anunció que no le dolerá la mano para señalar y pedir las investigaciones penales pertinentes. De igual forma garantizó tranquilidad porque tendrán cuidado a la hora de investigar y no “llevarse por delante” a alguien que compró de buena fe y cumpliendo los requisitos.
En dos meses se comenzaría a tener resultados de la investigación.