Autoridades denuncian la existencia de un lobby diplomático para desconocer el resultado de las elecciones del 6 de diciembre. Estados Unidos mueve sus fichas para detener el proceso de cambios democráticos en el continente
Alberto Acevedo
En opinión de la ministra de Relaciones Exteriores de Venezuela, Delcy Rodríguez, Estados Unidos ha desplegado un lobby diplomático, con el apoyo de los grandes medios de comunicación occidentales, para desconocer los resultados de las elecciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre.
La campaña internacional pretende legitimar acciones violentas de la derecha para amparar a sus agentes criminales, aseguró la funcionaria, quien a renglón seguido hizo un llamado de alerta a los movimientos sociales para mantenerse en solidaridad activa con Venezuela, ante los planes de Estados Unidos de desconocer los resultados de los comicios del próximo domingo.
La canciller venezolana dijo que con este plan se busca crear la imagen de un país violento y deslegitimar un proceso democrático, que para los venezolanos se ha traducido en el impulso a reformas sociales avanzadas que han aliviado la calidad de vida de las gentes del pueblo.
Las declaraciones de Delcy Rodríguez coincidieron con otras del vicepresidente ejecutivo de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza, quien aseguró que la ultraderecha venezolana está contratando grupos de mercenarios para cometer crímenes políticos en el país, de cara a las elecciones de “mitaca”.
Comprando mercenarios
“Nosotros tenemos información certera que hay mercenarios a los que están pagando 30 mil dólares, 50 mil dólares, por ir a hacer crímenes políticos”, aseguro el funcionario ante el cuerpo diplomático, convocado para recibir esa información. “La ultraderecha busca culpar al gobierno de Maduro, ante cualquier hecho que se presente” y restarle piso democrático al proceso electoral, preciso Arreaza.
Las declaraciones de los dos funcionarios gubernamentales estuvieron matizadas por el escándalo que la prensa burguesa venezolana y del exterior armaron en torno al asesinato, el miércoles de la semana pasada, del activista de la Mesa de Unidad Democrática, MUD, Luis Miguel Díaz. Fuentes del Palacio de Miraflores desmintieron de inmediato cualquier vinculación al hecho, en tanto que las autoridades judiciales iniciaron su propia investigación, y establecieron en principio, que el autor material del crimen sería Óscar de Jesús Noguera, vinculado a la banda “El Picure”, dedicada al robo, la extorsión y el secuestro, en el estado de Guárico.
Doble moral
Al mismo tiempo, fuentes de la fiscalía establecieron, que el fallecido Luis Manuel Díaz estaría vinculado a otra banda delincuencial denominada “Los Plateados”, y su muerte obedeció probablemente a un ajuste de cuentas por el control territorial entre las dos agrupaciones delincuenciales.
Lo que comienzan a preguntarse algunos observadores es por la calidad de las personas presentadas como ‘líderes’ por la oposición al gobierno Maduro, y que personajes como Lilian Tintori, esposa de del detenido Leopoldo López, defiende con tanto ahínco como prohombres de la nueva Venezuela.
Por su parte, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, terció en la polémica y condenó la manipulación de la derecha venezolana y de sus aliados internacionales, a quienes calificó de tener una ‘doble moral’. “¿Quién de ellos se pronunció cuando asesinaron al líder socialista Robert Serra? ¿Quién de ellos se pronunció cuando asesinaron al compañero de la Universidad del Zulia, Eleázar Hernández, a manos de un dirigente de la oposición?”, preciso Cabello.
El parlamentario oficialista dijo que está en marcha una campaña de descrédito en contra de la Revolución Bolivariana, de cara a las elecciones legislativas próximas, pero indicó que en la jornada del domingo el pueblo dará una lección e instó a la militancia a seguir luchando para no permitir que la derecha fascista se tome el poder.
No entregaremos la revolución
“Necesitamos diputados revolucionarios que vengan a la Asamblea Nacional a trabajar, pedir y luchar por su pueblo. Debemos convertirnos en soldados activos que el 6 de diciembre defiendan el triunfo de la Revolución. Ese día estará en juego el futuro de la patria, la posibilidad de que el pueblo siga avanzando y se siga empoderando, que sigamos construyendo viviendas, que sigamos entregando pensiones, que los niños tengan derecho al estudio y a la salud”, precisó Diosdado Cabello.
Las fuerzas gubernamentales no solo han debido enfrentar los discursos incendiarios y calumniosos de la oposición política. También actos de abierto sabotaje, como la colocación de bombas en las torres del sistema eléctrico nacional, con lo que pretenden sembrar el miedo entre los electores y torcer el sentido del voto. Esto hace que la sociedad esté en un momento de máxima tensión.
También el presidente Nicolás Maduro terció en la polémica y aseguró que respetará los resultados electorales como “palabra sagrada”. Dijo que al día siguiente a las elecciones convocará un diálogo nacional en Miraflores con todos los diputados electos, para tratar los grandes objetivos de desarrollo del país. Pero, anotó, bajo ninguna circunstancia “entregaremos la Revolución. Pasaremos a una nueva etapa. Pero la Revolución no va a ser entregada jamás”, enfatizó el gobernante.
