Varias organizaciones sociales y populares se hicieron presentes allí con sus ponencias en respaldo a los diálogos de paz que adelantan en La Habana entre el gobierno y la guerrilla de las FARC-EP.
Jorge Rivera C
En el municipio de Soacha (Cundinamarca), la primera semana de agosto se realizó un foro de víctimas que contó con la participación de dos centenares de habitantes de este municipio. Varias organizaciones sociales y populares se hicieron presentes allí con sus ponencias en respaldo a los diálogos de paz que adelantan en La Habana entre el gobierno y la guerrilla de las FARC-EP.
El foro fue presidido por la Mesa de Víctimas de Soacha, Central Nacional Pro vivienda, Andas, el personero municipal Henry Sosa, la Unión Patriótica, con Aída Avella, y el Partido Comunista. Los ausentes fueron la alcaldía y el concejo municipal.
Todas las ponencias que presentaron las organizaciones gestoras del foro coinciden que la paz es un compromiso del gobierno nacional y de todas las instituciones del Estado. “El gobierno de Juan Manuel Santos se comprometió en las pasadas elecciones y la paz es un derecho de todos los colombianos”, dijeron los asistentes.
Un gran respaldo por los participantes en el foro recibió el documento presentado por el Partido Comunista, el cual sintetiza unos elementos puntuales para tener en cuenta en las mesas de negociación y en la construcción de la paz y uno de ellos son los derechos de las víctimas, la no repetición de la violación de los derechos humanos, el modelo de violencia política ejercida contra las ideas de la oposición, la recuperación de la memoria del Partido Comunista, y la identificación de los orígenes del conflicto social y armado, entre otros elementos.
Así mismo se hicieron notar los efectos que ha producido el conflicto armado que vive el país, cuyos rigores se sienten en Soacha; una población desplazada que se acerca a las 50 mil familias procedentes de varias regiones del territorio nacional; un crecimiento urbanístico desmedido sin ninguna planificación, sin tener previstos los servicios públicos, no hay vías eficientes para la movilidad. Soacha carece de una salud digna, padece un alto desempleo, quizás el más elevado del país y a ello se suma el accionar permanente de los grupos paramilitares que siembran de horror y zozobra al municipio.
“Los que estamos aquí en este foro somos las víctimas de la violencia; más de 20 años de violencia, fueron miles de compañeros asesinados en la guerra orquestada desde el Estado contra los movimientos de oposición, contra la UP y el PCC; ordenados y financiados por empresarios y políticos y los grandes medios guardan silencio. Lo que nos han hecho no tiene reparación, pero aquí estamos dispuestos a dialogar”, señaló Aída Avella, llamando a todas las organizaciones a construir un gran movimiento amplio por la paz y la democracia.
