La profesora emérita de la Universidad Nacional, negociadora en el gobierno Santos con el ELN y responsable de la propuesta sobre participación, aunque no alcanzó a ponerla sobre la mesa, reflexiona sobre el proceso y propone salidas
Colectivo Rueda Suelta
Detrás de toda la crisis mediática entre el Gobierno y el ELN hay un clamor social en Nariño para que se avance en la solución política, para que se puedan implementar diálogos territoriales, incluso ceses multilaterales de fuegos, que no se caiga la mesa…
Me parece una necesidad, los efectos sobre las comunidades en los territorios donde actúa el ELN son dramáticos, (…) la clausura de cualquier dinámica social, o peor aún, de la clausura del cese al fuego, afecta mucho más a esas comunidades, me parece crucial un avance en un cese multilateral.
La situación en Nariño
¿Por qué cree que el Gobierno accedió a esos diálogos directos con el Frente Comuneros del Sur y no los llevó a la mesa nacional para articularlos? ¿Se puede leer esto como lo ha sugerido el ELN, una actitud divisionista por parte del ejecutivo?
Creo que es parte de reconocer una situación de hecho, (…) que ese Frente del departamento de Nariño haya insistido en querer negociar, (…) llevó un poco al Gobierno a tener que plantear una negociación con ellos, claro, eso ha generado en la mesa una reacción de parte del ELN, pero me parece que toda esa problemática, más que estimulada por el Gobierno, responde a la crisis de mando del ELN.
¿No puede ser que sean intereses e imaginarios externos y que el ELN, al permitirse disensos internos, logra construir consensos más fuertes de cara al cumplimiento de los acuerdos?
Es posible que esta estructura más federal, a diferencia de la estructura centralista que tuvo las FARC, permita justamente dinámicas más locales, y una estructura territorial mucho más concreta. En ese sentido, entiendo el llamado de Vera Grave e Iván Cepeda al presidente Gustavo Petro, más que para generar un cortocircuito, es para tratar de fortalecer las dinámicas nacionales y que en la mesa se pueda reflejar el conjunto de situaciones regionales específicas. Puede ser una mirada interesante para el Gobierno sobre la organización con la que se negocia y evitar, justamente, que se paralice la dinámica nacional por lo local.
Participación permanente
La periodista e investigadora venezolana Danna Urdaneta ha propuesto que, en el marco de la mesa de diálogo, es posible solicitar que Nariño sea declarada zona crítica y así incluirla como prioridad en la mesa nacional, articulando el diálogo regional de paz al Comité Nacional de Participación. ¿Ve esto posible?
Es una propuesta interesante. La zona crítica que ha mostrado ser Nariño podría reconocerse como tal y priorizarse. Poner en funcionamiento toda la dinámica de la participación de la sociedad que pasa por lo territorial.
Sin embargo, hay puntos contradictorios, el ELN ha dicho en la mesa que solo se llegará al punto del fin del conflicto armado cuando el Estado haya hecho todas las transformaciones que la población identificó. Eso es un poco complicado porque hay procesos que van a tomar años. No se trata de usar la participación para prolongar indefinidamente este conflicto armado.
Claro, pero más allá de que se construyan vías, acueductos u hospitales, ¿es importante abrir espacios institucionales para la participación efectiva con capacidad de incidencia en las políticas públicas, en el ejercicio de veeduría o en la construcción de presupuestos participativos?
Sí. De hecho, la propuesta de participación que planteamos en la mesa iba en esa perspectiva: que las dos partes de la mesa acordaran darle garantías a la participación permanentemente, a la expresión de esa población; (…) no se trata solo de unos cuantos eventos y luego esperar a que el Estado haga todo lo que digan esas comunidades. (…) apoyar y estimular esa participación de la población respetando su autonomía, su voz, eso es crucial para los procesos de transformación.
Finalización del conflicto
Iniciar un diálogo regional de paz al interior de Nariño implica que el departamento tiene fronteras con el Cauca, Putumayo y Ecuador, ¿qué retos implica esto y cómo ve que la territorialización se materialice?
Eso plantea muchos retos porque las mismas poblaciones tienen que tener entre ellas un nivel de diálogo importante. A veces ha habido tensiones entre las mismas comunidades por quién participa, uno u otro sector, y no recoge o no deja expresar a otros que tienen, no necesariamente contradicciones, pero sí especificidades. La territorialización implica demostrar que todas esas dimensiones tienen que ser consideradas.
Y muchas de esas dinámicas no están en un solo territorio, son de una subregión o de varios territorios. Y lo que se haga en uno u otro va a tener consecuencias no solo por las fronteras de un municipio o departamento, sino también por las fronteras internacionales. No se reduce solamente a mirar en lo concreto en un pueblito, sino que implica una mirada nacional, subregional, incluso, en algunos casos, bi o trinacional.
¿Cuál es el mensaje al Gobierno nacional y al ELN para persistir en la búsqueda de la salida política?
Es decisivo que la mesa no se paralice. Al contrario, que estimule el proceso participativo con claridad, no para usar a la gente en la perspectiva de uno u otro lado, sino generando condiciones para que esa participación no simplemente sea reunir gente, sino posibilidades reales de tomar iniciativas y de ayudarlas a desarrollar. Creo que tanto el Gobierno como el ELN tienen en esa mesa negociadora un desafío decisivo que no pueden desaprovechar. Tienen que construir un proceso que permita que la participación de la sociedad ayude a la finalización de este conflicto y que al final el ELN deje las armas.
Esta entrevista fue realizada en el marco de una confluencia de medios alternativos que acompañan el proceso de diálogo entre el gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez y el Ejército de Liberación Nacional ELN, entre los que se encuentran: Rueda Suelta (@rueda_suelta), Lucecitas de Maíz (@LuceElMaiz), La Constituyente Audiovisual (@LaConstwitt), Red de Prensa Alternativa Zur (@rpaz_prensa), Caribe Investigación (@caribeinvestig1) y la Escuela de Audiovisuales Fucoga (@Generacionalte)