Alberto Bermúdez
Las masas campesinas, admirables por su tenacidad en la lucha, tienden, partiendo de sus necesidades del presente, a emanciparse de la influencia oficialista, la movilización y la protesta en esta medida continuarán como en el pasado, guerreando al lado de las grandes organizaciones obreras y hoy también de estudiantes, con su aporte humano multitudinario y con sus innegables virtudes de lucha.
La madrugada del pasado 28 de agosto en la zona industrial de mamonal más de dos mil obreros afiliados a la Unión Sindical Obrera y en el marco de una mañana gris a causa de la pertinaz lluvia, la que no fue obstáculo para lograr el objetivo de los manifestantes que era y seguirá siendo la solidaridad y apoyo irrestricto al para agrario nacional, jornada que se desarrolló hasta después del mediodía, entrada la tarde casi noche cuando el panorama cartagenero se torna rojizo a causa de la palidez de los incandescentes rayos del sol, un grueso puñado de estudiantes en su mayoría, armados de un profundo patriotismo y abrazando en sus puños utensilios de cocina para realizar lo que conocemos como un cacerolazo, con los que irrumpieron la cálida estancia de enamorados y solitarios desprevenido que a esa hora transitan por el camellón de los mártires, los que atentos a las consignas correadas por los jóvenes, que revelaban la profunda problemática no solo del sector agrario sino de la miseria e inequidad en la que los sectores de poder tienen sumido a más del setenta por ciento de la población, su intención al igual que los obreros el apoyo hasta el final de la lucha que vienen dando los campesinos colombianos.
La alianza obrero-campesina y estudiantil no debe entenderse como un pacto coyuntural. La alianza obrero-campesina –estudiantil quiere decir, si hablamos en el plano de la sinceridad revolucionaria, que el proletariado los estudiantes y el campesinado trabajen políticamente tras de sí con consignas que importen la solución efectiva de sus más premiosos problemas. Esta alianza se da en el curso de la lucha, es la vanguardia revolucionaria la que gana la confianza delos campesinos al demostrar su consecuencia en la batalla, su sincera adhesión a los objetivos de la liberación de la mayoría nacional.
