En el último encuentro preparatorio de la III Asamblea Nacional por la Paz, convocado por la USO, el investigador y académico hace un recorrido histórico de la relación del sindicato con Barrancabermeja
Valentina Bolaño Senior
@Vale_BoSe
Giovanni Rivera Huertas, quien siempre acompaña las asambleas, es el encargado de hablar de la historia y la violencia antisindical, de la cual ha sido víctima la USO. Licenciado en Ciencias Sociales y con una maestría en Historia, comparte su conocimiento y experiencia docente: “Estoy feliz de estar en la rebelde Barrancabermeja”, dice con una sonrisa.
Barrancabermeja, cuna del movimiento sindical y social, fue protagonista en las discusiones sobre memoria, paz y cambio minero-energético. El Semanario VOZ, junto con Rivera, hizo un recorrido histórico por la sede principal de la USO nacional en la calurosa Barranca.
El naciente proletariado petrolero
Estamos en Barrancabermeja, en el lugar donde nació la USO. ¿Cómo ha sido la historia del sindicato más grande del país?
La Unión Sindical Obrera, USO, nace en 1923, cuando se da la exploración petrolera a gran escala con la Concesión de Mares. En esta primera etapa, la explotación es realizada por una empresa de Estados Unidos, Tropical Oil Company, que era la encargada de extraer y sacar el petróleo en esa zona del país.
Y como para extraer el petróleo se necesitaba mano de obra, más de diez mil trabajadores de todo el país llegaron al puerto, atraídos por la bonanza petrolera.
Por eso, en varias partes de Barranca hay una mezcla cultural, pues, fue el naciente proletariado petrolero quien la enriqueció.
La historia de la USO está marcada por las manifestaciones que exigían derechos laborales. La primera huelga, que tuvo lugar en 1924, se gestó frente a la primera petrolera del país. Este cese fue organizado por Raúl Eduardo Mahecha, el tipógrafo rebelde que pertenecía al Partido Socialista Revolucionario, junto con María Cano.
El paro fue totalmente reprimido porque decían que no era una manifestación por las reivindicaciones laborales, sino una sonada comunista.
Raúl Eduardo Mahecha tuvo un papel importante en las primeras huelgas que buscaban la dignidad del obrero…
Sí, en 1927, los trabajadores realizan otra huelga que también es liderada por Raúl Eduardo Mahecha, que deja dos muertos y cientos de trabajadores despedidos y desterrados.
Las autoridades prohibieron a Mahecha volver a Barrancabermeja, hay fotos donde él está junto con otros trabajadores, en un cepo. Y esa es la primera violencia antisindical: asesinato, destierro y muerte política.
La historia de la dignidad laboral
¿Cómo empieza Ecopetrol?
Surge también por medio de una huelga, ya en la década de 1940, se empieza a pensar en la creación de una empresa petrolera nacional, es decir, que los recursos minero-energéticos fueran explotados por una compañía colombiana.
Así pues, en 1948, el sindicato realiza una huelga; esta la gana la USO y se empieza a delinear los contornos de lo que, posteriormente, sería Ecopetrol.
Por tal razón, Ecopetrol, se dice, es hija de la USO porque su creación se la debemos en gran medida al sindicato.
No obstante, después de 1951, con la creación de Ecopetrol, empieza la Violencia, con mayúscula, de liberales y conservadores.
Esta Violencia llevó al asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, ¿qué pasó después de esto?
Barrancabermeja vivió un suceso extraordinario en la historia política y social del país. Allí se creó la Junta Revolucionaria de Barrancabermeja. La guardia que protegía la Junta y el puerto petrolero eran los mismos trabajadores petroleros.
Esta Junta estuvo dirigida por Rafael Rangel, que era una persona muy reconocida en el puerto petrolero. Sin embargo, cuando se acabó la Comuna de Barrancabermeja, que dura diez días, Rangel creó una guerrilla liberal, durante esos días de la Comuna de poder popular, es duramente reprimida, hasta se amenazó con descabezar el movimiento de la Junta Revolucionaria.
Giovanni, pasaron los años y la USO cada vez era más fuerte no solo en Barrancabermeja, sino en todo el país.
Sí, hay una gran relación entre la ciudad y la USO. Cuando llegó la década de 1960, las primeras huelgas, con Ecopetrol ya creada, se hacen por la dotación de servicios públicos y el sindicato lidera varias de ellas. Por tal razón, en algunos barrios nororientales hay logos de la Unión Sindical Obrera.
El sindicato se convirtió en un referente social y político, cuando paraba la USO se paralizaba el país. La USO creció con Barrancabermeja y Barrancabermeja creció con la USO.
¿Esta unión persiste?
No, ya no es la misma relación entre el movimiento comunal, social y la USO, por todas las décadas de violencia durante las cuales fueron víctimas.
El apoyo al movimiento sindical era masivo, sin embargo, se ha debilitado por toda la violencia estatal y paraestatal.
Por eso, la USO está en el camino de retomar la relación con los otros movimientos sociales y las comunidades de Barrancabermeja, para que vuelva a ser lo que era hace treinta años.
La rebelde
Hablaba sobre la Barrancabermeja rebelde. ¿Cómo es eso?
Llegó un punto en que Barranca agrupaba tantas organizaciones de izquierda que muchas personas, desde otras regiones, venían a aprender de la ciudad. Se decía que Barrancabermeja era como la universidad de la izquierda.
Esta ciudad ha resistido por más de cien años, lo que generó un imaginario colectivo de rebeldía, de beligerancia política. Es una historia de resistencia, de lucha y movilización.
Por último, Giovanni, ¿cómo ha sido el camino hacia la III Asamblea Nacional por la Paz?
La participación de las comunidades ha sido fundamental porque son las que más sufren los impactos de la industria petrolera. Estamos buscando que haya soluciones tangibles y no convertirnos en una asamblea del montón.
Esperamos que el Gobierno esté presente y conozca lo que está sucediendo en las regiones sobre la paz, la memoria y la transición minero-energética. Es necesario que se elabore un mapeo de las situaciones sociales para buscar, conjuntamente, soluciones y alternativas.