La audiencia fue con representantes de la Mesa Nacional de Participación Efectiva de las Víctimas de Colombia. El grupo se encuentra en Europa con la misión de alzar la voz para contribuir a la protección de la vida y la consolidación de la paz
Germán Ávila Niño
La Mesa Nacional de Participación Efectiva de las Víctimas y el Foro Internacional de Víctimas –organizaciones que acogen en su espectro a más de 9.5 millones de colombianas y colombianos– desarrollan una gira de incidencia política y parlamentaria en Europa, entre el 25 de septiembre y el próximo 8 de octubre.
Esta delegación ya ha sido recibida por el Papa Francisco en el Vaticano, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Ginebra, el Parlamento Europeo en Bruselas, así como por otras importantes instituciones, personalidades políticas y gobiernos en Europa.
Construyendo puentes
Como parte de la importante necesidad de dar a conocer las voces de las víctimas del conflicto armado en Colombia, se ha entregado el documento Las Víctimas colombianas trabajamos por la Paz Total, construyendo puentes de hermandad, que recoge las grandes preocupaciones, necesidades y expectativas en torno a seis grandes temas:
1) El precario estado de la implementación del Acuerdo de Paz; 2) El genocidio del que están siendo víctimas las y los líderes, jóvenes, defensores de los derechos humanos, del medio ambiente y excombatientes firmantes de la paz; 3) La precaria situación de las víctimas del conflicto; 4) La necesidad de acompañamiento, veeduría y apoyo a la implementación del Acuerdo de Paz, que el nuevo gobierno se propone como meta prioritaria, así como a su política de la Paz Total. 5) El apoyo y difusión internacional que requiere el Informe Final de la Comisión de la Verdad; 6) El reconocimiento de la Mesa Nacional de Participación Efectiva de las Víctimas y el Foro Internacional de Víctimas como interlocutores válidos tanto para el diálogo directo, para el desarrollo de proyectos dirigidos a las víctimas, así como para la elaboración y/o ejecución de los mismos.
Los anuncios hechos y las medidas tomadas por el presidente Gustavo Petro con respecto a la paz, y a su deseo de crear escenarios de reconciliación marcan un camino que las víctimas ven con esperanza, aunque la realidad en los territorios también genera una serie de preocupaciones sobre la necesidad de acompañar desde el ámbito internacional un camino que conduzca a superar por fin las expresiones armadas de un conflicto alimentado por la exclusión y el abandono.
La reunión con el Papa
Esta gira, de la que han hecho parte víctimas de diferentes actores del conflicto colombiano a lo largo de su historia, ha tenido dos perspectivas de incidencia. La primera va dirigida a establecer espacios de interlocución política en instancias participativas y estatales, como el Parlamento Europeo, la ONU, e incluso el Vaticano, que sin duda constituye un aliado de gran peso en términos de interlocución y apoyo a las víctimas de Colombia.
Por otro lado, ha sido fundamental el establecimiento de canales de coordinación con entidades que también permitan el desarrollo de proyectos productivos dirigidos a las víctimas, pero que tengan como principales gestores y ejecutores a las víctimas mismas, ya que son este tipo de escenarios los que propician que ya no sean objeto sino sujeto en la intervención frente a sus necesidades más sentidas.
Las reuniones bilaterales que han sido con miembros del parlamento danés, la comunidad religiosa de las Hermanas Scalabrinianas, el Comité Internacional para el Desarrollo de los Pueblos o la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, tuvieron su punto de mayor atención mediática cuando el pasado 1 de octubre se llevó a cabo una audiencia privada de 36 minutos con el Papa Francisco, máximo representante de la iglesia católica, jefe de Estado del Vaticano y una de las figuras más influyentes de la política actual.
El Papa escuchó atentamente la narración que las víctimas hicieron con su propia voz sobre las realidades del conflicto, la migración y el exilio y recibió de manos de la delegación el documento presentado, que hojeó con atención mientras escuchaba a los y las intervinientes. Luego tomó la palabra y tras felicitar a la delegación y las organizaciones que estuvieron tras el esfuerzo de la gira, insistió en la necesidad de fortalecer la unidad de las víctimas a través de la organización y avanzar en los objetivos comunes evitando divisiones y dispersión.
VII Foro Internacional de Víctimas
La gira, que terminará el próximo 8 de octubre en España y que ha pasado antes por Italia y Bélgica, tiene como objetivo también dar a conocer a nivel internacional la intención de las víctimas del conflicto colombiano por organizarse y generar espacios de incidencia e interlocución de manera directa con organizaciones, entidades y Estados.
De tal forma que sea la voz misma de los y las protagonistas en medio de toda su diversidad la que permita apuntar a los elementos de mayor importancia para mejorar las condiciones de quienes han sido vulnerados y por evitar que estas situaciones continúen ocurriendo. Colombia tiene que dejar de ser un estado victimario y expulsor por excelencia.
En esa dirección, esta gira también puso en la agenda europea la realización del VII Foro Internacional de Víctimas en la ciudad de Torrevieja, España, que entre el 25 y el 27 de noviembre del presente año, reunirá víctimas provenientes de los dos lados del Atlántico, residentes en 23 países y cuya principal tarea, tal como en las seis ediciones anteriores, será intercambiar experiencias, visiones y perspectivas sobre la migración, el refugio, el exilio y cada componente del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y no Repetición, entre otros temas.
Durante las anteriores versiones del Foro Internacional de Víctimas, se han presentado informes a la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, se han establecido compromisos de colaboración con la Comisión de la Verdad y se han puesto a disposición herramientas y personas para fortalecer el trabajo de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas en el marco del conflicto.
Además, se han establecido canales de interlocución con diversas entidades a nivel nacional e internacional en la búsqueda de avanzar en el reconocimiento de las víctimas como una de las fuerzas vivas más importantes del entorno social en Colombia.