“El camino está lleno de desafíos y adversidades que estamos obligados a enfrentar y a superar, con espíritu de victoria, con esfuerzo y talento, con empeño, con unidad, y sobre todo con creatividad”, dijo Miguel Díaz-Canel
Alberto Acevedo
Muy crítico, frente a las responsabilidades de los comunistas y de los funcionarios del gobierno en torno a las decisiones del Estado en el manejo de la economía, del contacto real con las masas, de la superación de la crisis económica y del manejo de las secuelas del criminal bloqueo económico impuesto por Estados Unidos a la Isla, fueron los términos del enfoque del VI pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, que sesionó en La Habana el 23 de mayo pasado.
“Que cada uno haga lo que le corresponda”, superando expresiones de acomodamiento, de burocracia. “Hay sectores del pueblo en los cuales se reflejan insatisfacciones con lo que hacemos y hemos hecho, con las medidas y la manera de su implementación”, dijo en la reunión el presidente de la república y primer secretario del Comité Central del Partido, Miguel Diaz-Canel.
En desarrollo de las sesiones, abundaron los análisis crudos, directos, sin tapujos, sobre el papel de los comunistas en el manejo de los problemas internos de la nación antillana. Fue un análisis “a camisa quitada”, como se dice en el lenguaje usual de los cubanos. En Colombia se prefiere la expresión “a calzón quitao”.
Crecer y resistir
Díaz-Canel dijo que, en la actual coyuntura cubana, es preciso “pasar del discurso a la acción (…) Es un reto que demanda de participación, integralidad y agilidad, haciendo cada uno lo que le corresponde, alentando, motivando y demostrando que sí se puede”, precisó el gobernante.
“El camino está lleno de desafíos y adversidades que estamos obligados a enfrentar y a superar, con espíritu de victoria, con esfuerzo y talento, con empeño, con unidad, y sobre todo con creatividad; el tema no es solo de resistir, el tema es resistir y crecer a la vez”, precisó.
Díaz-Canel presentó detalles de una serie de visitas que él ha realizado a las provincias, a los barrios, a las empresas, conversando con la gente, buscando que este año las cosas mejoren. “Ha sido un proceso crítico y autocrítico fuerte, sin autocomplacencias, y las reuniones han sido fuertes, de insatisfacciones, como el propio debate de este pleno”, puntualizó el gobernante.
Vencer el bloqueo
“No estamos satisfechos, ni consideramos que es suficiente mientras esos resultados no se expresen en una mejoría palpable en la calidad de vida de nuestro pueblo, expresados en una mayor producción de alimentos, menos inflación, mayor calidad de los servicios, por solo mencionar algunos de los renglones que estamos evaluando”. Dijo que en esta materia hay avances, ha encontrado capacidad de gestión en la gente y se puede seguir avanzando en esta dirección.
Con esta convicción, y con base en el esfuerzo, el empeño, el incentivo y la voluntad que se aprecia en muchos lugares para salir de esta difícil situación, el mandatario convocó a todo el pueblo “a vencer el bloqueo sin esperar a que lo levanten y vencerlo desde el nivel local. Es una tarea que requiere constancia, trabajo, dedicación, sentido de pertenencia. No de uno, sino de todos”, precisó el presidente.
Para ello es necesario, dijo, aprovechar potencialidades en los territorios para generar nuestros propios alimentos y seguir potenciando la autonomía municipal, donde cada municipio produzca lo que necesita en alimentación.
Ejército de vanguardia
Exhortó a fortalecer la empresa estatal, reducir la excesiva cadena de intermediarios en la comercialización de alimentos, que incide en la formación de los precios. Insistió en la responsabilidad del partido, en el papel que les corresponde a los militantes en todas las estructuras para que los compromisos se cumplan. “A ese ejército de vanguardia que integra nuestra militancia estamos movilizando, desde todos los niveles”, añadió Díaz-Canel.
En una esfera que pudiera llamarse de rendición de cuentas, Díaz-Canel destacó el análisis que el pleno llevó a cabo sobre un tema tan importante como el estado de cumplimiento de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, en un escenario complejo, que se ha venido agravando en los últimos tiempos, “provocando deterioros de infraestructuras, desabastecimientos, carencias y también deterioro social”.
En los últimos meses -añadió- se complicó un grupo de situaciones, sobre todo por los problemas de generación eléctrica y el déficit de combustibles, y “como dirigentes políticos y servidores públicos que somos, no podemos descansar hasta vencer este desgaste”.
Esta situación -puntualizó- representa un enorme reto para la dirigencia política de la isla, como Partido y como Gobierno, de orientar el trabajo hacia salir de la situación compleja en lo económico y social que vive el país con un aseguramiento político integral y exigente desde el Partido, que estimule la comprensión y la participación del pueblo, fortalezca la unidad, brote la esperanza, provoque el fortalecimiento del funcionamiento de la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento) y propicie una gestión ágil y efectiva del gobierno, desde el nivel local hasta la nación.
Resumiendo su intervención, el secretario general del Partido y presidente de la nación insistió en la necesidad de desterrar la inercia, el burocratismo, quitar trabas y eliminar la autocomplacencia y anunció que en un tiempo prudencial se convocará la Segunda Conferencia Nacional del Partido.
