Nelson Armesto Echavez
Patio Bonito al Día
Alejandro Torres Cárdenas, edil por el Movimiento Progresistas en Kennedy, explicó a nuestro informativo las razones por las que a la empresa cervecera Bavaria se le pidió que abandonara la localidad. Para Torres Cárdenas, quien tiene conocimientos previos sobre el tema ambiental, dijo que lo primero a tener en cuenta es que las instalaciones donde funcionaba la antigua empresa Bavaria son nueve predios privados unidos en uno solo.
Al abandonar el predio, Bavaria deja un terreno de unas 80 hectáreas, las cuales son susceptibles de un desarrollo urbano, lo cual, según el cabildante, iría acorde con el nuevo modelo de ciudad que se construye en Bogotá que no es de expansión expropiando a campesinos en Usme, tampoco sometiendo a ciudadanos de estratos 1 y 2 a ubicarse en Bosa en áreas de peligro crítico de inundación, mucho menos hacia el norte donde está la zona de inundación del río Bogotá.
Por tanto, agregó Cárdenas, Bogotá hoy tiende a densificarse y no a expandirse, y al identificar las zonas aptas para el desarrollo urbano, el Distrito, dijo el cabildante, se encontró con la joya de la corona que es el predio de Bavaria, 80 hectáreas que hoy pueden ser utilizadas como vivienda de interés social y prioritario.
El edil dijo que el argumento de que ese terreno debe ser usado para un parque y conservación de áreas forestales en defensa de los árboles ahí sembrados no tiene validez, ya que en esa área lo que hay sembrado es eucalipto, especialista en disecar suelos, pinos que acidifica y urapanes y acacias que tienen problemas de volcamientos.
Por tanto, dijo, no hay una intención real de defender el material vegetal ni que el Distrito pretenda ir en contra de la construcción de un parque, ya que Bogotá hoy no puede adquirir 80 hectáreas para un parque metropolitano cuando se requieren suelos aptos para el desarrollo urbano de la ciudad bien sean de interés social o prioritario ya que hay un déficit de 750 mil complejos habitacionales, agregó.
Tampoco es cierto, dijo Torres Cárdenas, que se vayan a construir todas las 80 hectáreas ya que estas deben tener un espacio de excepción aproximado al 26% del área total, lo que significaría que unas 30 hectáreas serían áreas de excepción y espacios públicos, espacios verdes, educativos y culturales.
Lo más difícil es construir en lo construido, dijo Alejandro Torres, y al tener un lote disponible como lo es el lote de Bavaria y que el POT ya lo metió dentro del anillo de renovación urbana, buscando cómo fomentar un desarrollo urbano sostenible y amigable con el medio ambiente, aprovechando que en ese predio hay un humedal conocido como el humedal de Bavaria derivado desde cuando el río Fucha se crecía.
Dijo además que con el desarrollo urbanístico sobre los antiguos predios de Bavaria, los ganadores serían los kennedianos que vivirán allí, los cuales no pueden ser modelo de segregación ya que la realidad de Kennedy es de estratos 1 y 2 y escasamente un estrato 3 representados en gran minoría en UPZ como la 113 y la 46, pero realmente quien gana con ese megaproyecto es Bogotá, porque no va a expandirse hacia áreas de especial importancia ecológica ubicados en el norte, el vallado del río Bogotá y hacia la ruralidad, también gana la ciudad en ordenamiento territorial porque Bogotá tiene que pensar en un modelo de crecimiento en altura de densificar y con esto se unificará más a las comunidades.
