Campesinos e indígenas que habitan esta región, nuestro apoyo decidido y solidaridad en estos momentos de resistencia, estaremos siempre por la defensa de la vida, la dignidad y el territorio.
La Unión Patriótica, partito político, comprometido con la búsqueda de la paz con justicia social y las justas luchas del pueblo colombiano por alcanzar sus reivindicaciones sociales y económicas, expresa su preocupación por el anuncio de las autoridades gubernamentales y la Fuerza Pública sobre una nueva arremetida violenta contra el Catatumbo, anunciando la erradicación manual y ahora último la amenaza de fumigaciones aéreas con el letal veneno Glifosato que afecta de manera grave la salud de los habitantes de la región, el ecosistema y los cultivos de pan coger y productivos, todo con el sofisma de acabar los cultivos de uso ilícito.
Esta amenaza contra el Catatumbo y nuestra gente demuestra el talante ambivalente y contradictorio de éste gobierno, hace un par de meses se anunciaba la eliminación de la aspersión aérea del Glifosato por recomendación del Ministerio de Salud con base en el informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el cual se determina que dicho producto es peligroso y puede causar cáncer en el cuerpo humano. Sin olvidar, el acuerdo alcanzado en la Habana con las FARC-EP sobre sustitución de los cultivos de uso ilícito concertado con las comunidades y con la implementación de programas sociales, económicos, de infraestructura y de producción para el campo colombiano. Con éste hecho, el Gobierno Nacional rompe el acuerdo logrado en el Paro Campesino del Catatumbo del 2013 de no erradicar hasta que se implementen programas sobre sustitución de cultivos de uso ilícito. Ahora, desde el alto gobierno y la Fuerza Pública sólo se vocifera la necesidad de una intervención militar y de esparcir el agrotóxico de manera indiscriminada sobre el Catatumbo. Lo anterior es confirmado por el desembarco en días anteriores de cientos de soldados en la base militar de Tibú.
Es claro, al gobierno le importan más las cifras del supuesto aumento de los cultivos de uso ilícito en el Catatumbo, que el gran número de personas que se verán afectadas en su vida, salud y el único modo de subsistencia de muchas familias, al igual que la fauna y la flora de nuestro ecosistema. Estas medidas buscan desplazar y expulsar al pueblo de su territorio para dejar pista libre a las multinacionales que acechan quedarse con el Áreas de Reserva Estratégica Mineras decretadas por el gobierno en el Plan Nacional de Desarrollo, las cuales ocupan las legítimas pretensiones de establecer Zona de Reserva Campesina y ampliación de Resguardo Indígena; al igual que la actual Zona de Reserva Forestal.
Hacemos un llamado al Gobierno de Juan Manuel Santos para que inicie un verdadero desescalamiento de la guerra económica y social contra el pueblo colombiano. Convocamos a todas las organizaciones sociales y campesinas del Catatumbo (Ascamcat – Cisca y MCP), a Ñatubaiyibarí, al Consejo Autónomo de Caciques y a todo el pueblo indígena Barí, al movimiento comunal, organizaciones de Derechos Humanos, sectores políticos de izquierda y progresistas a unirnos en un solo haz de voluntades en la movilización social por la defensa del territorio y de nuestro Catatumbo.
Campesinos e indígenas que habitan esta región, nuestro apoyo decidido y solidaridad en estos momentos de resistencia, estaremos siempre por la defensa de la vida, la dignidad y el territorio.
¡Que viva el Catatumbo!
¡Queremos justicia social para la paz!
Unión Patriótica
Junta Departamental de Norte de Santander
