Libardo Muñoz
A las cinco de la tarde del viernes 8 de marzo tuvo lugar en Cartagena un emotivo homenaje a la memoria del comandante de la revolución bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías.
El acto se desarrolló en el Parque de Bolívar, al pie del monumento al Libertador, donde tantas veces el presidente Chávez estuvo en el desarrollo de sus visitas a esta ciudad como delegado en cumbres y encuentros continentales.
Se caracterizó este homenaje a Chávez en Cartagena por la emotividad de amplios sectores ciudadanos que, en la hora mencionada, se concentraron durante una larga jornada dedicada a la reflexión sobre un hecho que no sólo enluta al pueblo venezolano sino a la comunidad anticolonialista del mundo entero.
Como demostración de afecto por el líder venezolano, muchas personas llevaron retratos, figuras en miniatura del presidente con boinas rojas, letreros y pancartas donde se leían frases verdaderamente conmovedoras, puestas en el enorme pedestal de granito que sostiene la estatua ecuestre del Libertador Simón Bolívar.
Oradores espontáneos, jóvenes estudiantes, dirigentes sindicales, mujeres, ciudadanos del común, exteriorizaron muchos de ellos sin poder contener las lágrimas, toda la admiración por el líder desaparecido y sus actos de avanzada continental, en la búsqueda del bienestar de Venezuela y de otros países a donde llegó su internacionalismo en forma de convenios económicos basados en el equilibrio y el respeto mutuo.
El homenaje a Hugo Chávez en Cartagena duró más de dos horas y sirvió en mucho para que reaparecieran formas de solidaridad comunitaria muy tradicionales en la ciudad.
Como una consigna más, se leía grabada en la piedra del monumento a Bolívar la célebre frase del Libertador: “Cartageneros, si Caracas me dio vida, vosotros me disteis gloria, salve Cartagena redentora”.
