“No iremos a la asamblea a dormir, ni a hacer acuerdos por las alturas para traicionar la esperanza del pueblo tolimense, vamos a luchar por los intereses de la clase social a la cual pertenecemos a todo honor, a defender la unidad del pueblo y a forjar la democratización de la Asamblea”
Nelson Lombana Silva
Danilo López Carrero, candidato a la asamblea del Tolima por la Unión Patriótica, marcado en el tarjetón con el número 52, es ante todo un campesino que ha vivido paso a paso el desarrollo histórico de este movimiento político que el Estado intolerante, en contubernio con el paramilitarismo y un sector del militarismo, intentó borrar de la faz de la tierra a sangre y fuego, pero que no pudo y como el ave fénix hoy resurge de las cenizas de la antidemocracia con mucho vigor y esperanza, la Unión Patriótica, UP.
Danilo lo dice con sus propias palabras: “La UP dejó profundas huellas en el corazón y en la conciencia del pueblo colombiano. La Unión Patriótica es el partido que ha tenido el coraje, junto al Partido Comunista, de enfrentar a este régimen inhumano, criminal, antidemocrático, reaccionario e incapaz de resolver las necesidades del pueblo colombiano”.
A pesar de las limitaciones económicas, la inseguridad reinante en este departamento y el sistema electoral antidemocrático y ventajista a favor de la clase dominante, Danilo López Carrero, viene recorriendo el departamento encontrando entre los campesinos e indígenas alegría y memoria. “Por estos días recorrimos el sur del Tolima – dice – y encontramos la solidaridad de los gobernadores indígenas y de los candidatos a los concejos municipales seriamente comprometidos con la lucha revolucionaria. El recibimiento fue cálido en Coyaima, Natagaima, Ortega, Purificación, Flandes, Icononzo, etc.”.
En el municipio de Líbano, al norte del departamento, López Carrero encabezó un recorrido por sus principales calles enarbolando la bandera de la invencible Unión Patriótica, al lado de una muchachada que aspira al concejo, al lado de Julio Adrián Páez, candidato a la alcaldía de esta municipalidad por el Partido Verde en alianza con la UP y al lado de la comunidad que espontáneamente salió a recibir la caravana de la vida y de la esperanza. “Salimos a las calles y fuimos a las casas de muchos habitantes y la gente nos recibió con todo el cariño del mundo, con admiración de volver a ver la bandera de la UP por las calles reclamando democracia, derecho a la vida y paz con justicia social”, señala Danilo.
El pueblo tolimense reconoce que Danilo López Carrero tiene autoridad moral, ética y política. Reconoce en él a un líder frentero, directo y consecuente. En las distintas movilizaciones campesinas, indígenas, obreras, de defensores del medio ambiente como la marcha carnaval, siempre ha estado en primera línea, muchas veces recibiendo gases lacrimógenos y amenazas del establecimiento. “Nuestra lucha es callejera ante todo”, señala.
Propuestas e iniciativas
Cinco temas centrales definen su candidatura de: La paz con justicia social y la defensa de los diálogos de La Habana, la defensa del medio ambiente y el rechazo absoluto a la política santista de la locomotora minero – energética, la defensa de lo público, lucha frontal contra la corrupción y democratización de la Asamblea Departamental del Tolima.
Según el dirigente upeista, el momento actual más importante lo determina el proceso de paz entre las FARC–EP y el gobierno Santos. “Estamos ad portas de poner fin a un conflicto que supera los 50 años, conflicto generado por esta rancia oligarquía con el apoyo de los Estados Unidos, en ese sentido tenemos que ganarle la partida a los halcones de la guerra, a los traficantes de la muerte, apoyando el proceso de paz. Dirigente de izquierda que se respete, apoya decididamente el proceso de paz y le exige al gobierno nacional cese bilateral de fuegos ya y que las partes no se paren de la mesa hasta tanto no haya un acuerdo satisfactorio para ambas”.
El tema ambiental en el Tolima es preocupante y así lo entiende Danilo López Carrero. Cerca del 85 por ciento del territorio tolimense se encuentra concesionado en títulos mineros, unos concedidos y otros por conceder. “Hoy están en inminente peligro de desaparecer las montañas, las cuencas, el nevado del Tolima, los montes de niebla, la fauna, la flora, gracias a esta política imperialista neoliberal de las multinacionales y transnacionales. Tenemos que apoyar la lucha de los ambientalistas, pero también prepararnos para un paro cívico. Quién lo creyera, pero Ibagué está consumiendo agua contaminada en un altísimo porcentaje, esta ciudad de 600 mil habitantes se está quedando seca y la salida de los gobernantes de turno es la privatización del Ibal. “Sabemos que el Ibal lo han convertido las administraciones municipales en caja menor para hacer politiquería, financiar campañas y mantener la burocracia de la clase dominante”, señala.
López Carrero se identifica plenamente con el doctor Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez en el sentido de que la mafia tiene tomada la ciudad musical de Colombia, son máquinas electorales monstruosas que tienen a la ciudad colapsada en todos los campos posibles. “La corrupción es la constante, es un cáncer que carcome las instituciones impidiendo su desarrollo. Prolifera el menudeo del narcotráfico, la ciudad tiende a convertirse en paraíso fiscal de capitales de dudosa procedencia, no hay ordenamiento territorial democrático, la movilidad es exigua y como si fuera poco la red pública hospitalaria está a punto de morir, cientos de jóvenes no pueden ir a estudiar y el desempleo es galopante. Los campesinos no tienen centro de comercialización, son víctimas de los intermediarios y los carteles de la mafia, no tienen caminos ni carreteras en buenas condiciones para sacar sus productos al mercado. Las plazas de mercado no tienen una organización”, subraya.
López Carrero tiene clara su misión en la duma departamental. Por eso, demanda de los tolimenses su respaldo para salir elegido el 25 de octubre. “No iremos a la asamblea a dormir, ni a hacer acuerdos por las alturas para traicionar la esperanza del pueblo tolimense, vamos a luchar por los intereses de la clase social a la cual pertenecemos a todo honor, a defender la unidad del pueblo y a forjar la democratización de la Asamblea. La Asamblea del Tolima no puede seguir siendo un club exclusivo de la clase dominante, debe ser un espacio de lucha política, de denuncia y de organización. Nos comprometemos a izar allí la bandera de la UP con entusiasmo y conciencia social y de clase en homenaje a todos los caídos y como esperanza para las presentes y futuras generaciones. ¡Venga esa mano Tolima!”, termina diciendo Danilo con mucho optimismo.
