viernes, marzo 29, 2024
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¡Parar la guerra ya!

Declaración de la Junta Nacional de la UP

Conferencia UP

La XIII Junta Nacional de la Unión Patriótica, reunida los días viernes 26 y sábado 27 de junio en la ciudad de Bogotá, con participación de delegados provenientes de 26 departamentos del país, abordó en sus deliberaciones el análisis del momento político, las complejidades por las que atraviesa el proceso de paz, y en su contexto, el papel de las fuerzas de izquierda y democráticas en la lucha social y en las elecciones a realizarse el próximo 25 de octubre.

Para la UP es un imperativo ético y político exigir que se pare la guerra ya y se detenga la muerte de combatientes de ambos bandos, así como los efectos negativos de la confrontación sobre la población civil. Nos duelen todos los muertos de esta guerra, en su inmensa mayoría provenientes de sectores populares, porque los hijos de quienes quieren la guerra no arriesgan sus vidas combatiendo en las primeras líneas de fuego.

El cese unilateral e indefinido al fuego decretado por las FARC-EP fue una decisión política que redujo el conflicto armado significativamente, favoreciendo el ambiente de paz y convivencia en regiones históricamente golpeadas por la confrontación. Así lo demostraron los informes mensuales presentados por el Frente Amplio y otros organismos independientes. Al presidente Santos le corresponde cumplir el mandato ciudadano por la paz de los sectores democráticos que hicieron posible su reelección en segunda vuela. La UP reitera su llamado a iniciar diálogos lo más pronto posible con los demás grupos insurgentes y a unificar un solo proceso. Además, respalda la convocatoria al Encuentro Nacional de Paz previsto para los días 22 y 23 de julio.

En el marco del actual proceso de paz y del tratamiento de los temas relacionados con los derechos de las víctimas, reafirmamos la exigencia para que se reconozca la responsabilidad del Estado por el genocidio contra la Unión Patriótica, y se garanticen sus derechos a justicia, verdad, reparación integral y garantías de no repetición, tal cual se ha demandado en el proceso que se adelanta ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Igualmente, exigimos justicia para castigar a los altos mandos militares responsables de miles de crímenes y violaciones al DIH, nuevamente denunciadas en el informe de Human Rights Watch.

La UP valora positivamente el acuerdo suscrito entre el Gobierno y las FARC-EP para la conformación de la Comisión de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición, y desde ya se compromete a trabajar con sus afiliados, víctimas y sobrevivientes en un proceso de estudio y construcción de propuestas que aporten a su buen funcionamiento y eficacia en favor de los derechos de las víctimas, la justicia, la paz y la reconciliación nacional. Así mismo, se pronuncia a favor de un proceso constituyente como expresión de un nuevo pacto social y político ligado a la superación de la larga guerra interna, que permita la reconstrucción de una nueva institucionalidad para la paz.

En otros campos de la situación del país la Junta Patriótica se manifiesta en contra de los contenidos regresivos de los principales proyectos aprobados en la legislatura que acaba de terminar, impuestos por el Ejecutivo en acuerdo con las bancadas de los partidos tradicionales. Estas reformas constitucionales y legales aprobadas por el oficialismo como el Plan Nacional de Desarrollo, la mal llamada ley de equilibrio de poderes, la reforma al fuero militar, entre otras que se preparan como la reforma al código de policía, refuerzan la orientación neoliberal y antidemocrática del régimen político.

Reiteramos el compromiso con las luchas sociales y la solidaridad con los miles de detenidos políticos y sus exigencias de trato digno, justicia y libertad, en especial con David Rabelo y Húbert Ballesteros.

En el campo propiamente electoral, denunciando la falta de garantías que persiste en el sistema político colombiano para la izquierda y los sectores populares, la UP privilegia candidaturas de coalición programática a cargos uninominales aportando su ideario y su personería jurídica. Así mismo, trabaja por listas unitarias con la personería de la UP a las asambleas, concejos y JAL en los territorios donde existan condiciones. La Junta Nacional aprobó en forma unánime el acuerdo programático de la Unión Patriótica con la campaña a la Alcaldía de Bogotá liderada por Clara López del Polo Democrático Alternativo.

Convoca a los liderazgos que representan propuestas honestas y de verdadero compromiso con los intereses populares, a las nuevas generaciones de dirigentes, hombres y mujeres voceros de las luchas agrarias, obreras, estudiantiles, cívicas y a las nuevas ciudadanías a integrarse a estas listas y a representar con transparencia y compromiso el legado intachable de la organización a través de programas comprometidos con los cambios sociales, la lucha frontal contra la corrupción, y el apoyo decidido a la solución política y a los procesos de paz desde los territorios.

La participación electoral para la UP no es un fin en sí mismo sino un instrumento para ir reconstruyendo su presencia política nacional a favor de un proyecto unitario y de convergencia de las izquierdas y los sectores alternativos en la perspectiva de un gran Frente Amplio por la Paz, la Democracia y la Justicia Social.

Como un hecho histórico en esta junta nacional, tuvimos la participación del delegado del pueblo raizal de San Andrés y Providencia, a quien la UP acompaña en sus reivindicaciones: declaratoria de urgencia por el etnocidio del pueblo raizal frente a la falta total de protección de sus derechos individuales y colectivos a la tierra; peticiones por la autonomía, reconocimiento a la autoridad y el empoderamiento económico del pueblo raizal.

Estamos convencidos del triunfo de los procesos sociales y políticos antineoliberales que recorren todo nuestro continente, y nos solidarizamos con sus luchas. Manifestamos nuestro rotundo rechazo a toda la estrategia de desestabilización de estos gobiernos legítimos, especialmente en los casos de Venezuela y Ecuador.

Exigimos la abolición de las bases militares estadounidenses y europeas que pretenden amenazar la soberanía de toda Nuestra América. Respaldamos la decisión de la Celac de declarar al continente latinoamericano y caribeño como un territorio de paz.

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