La ampliación de planta de personal, una mejor infraestructura, la formalización del empleo y el incremento salarial que no se realiza hace seis años, son las principales peticiones de los trabajadores del Hospital Meissen, en Bogotá.
La ampliación de planta de personal, una mejor infraestructura, la formalización del empleo y el incremento salarial que no se realiza hace seis años, son las principales peticiones de los trabajadores del Hospital Meissen, en Bogotá.
“Cuando llegó Petro a la Alcaldía fue por los hospitales y prometió a los trabajadores que les cambiaría la contratación y que este sería el primer hospital al que le formalizaría el empleo; eso no se ha cumplido”, explica Fany Cárdenas, presidenta de Sintrameissen.
Los abusos laborales han llegado al punto que hace tres meses 69 empleados de servicios generales, quienes durante 17 años estuvieron con prestación de servicios, “fueron despedidos para contratar una empresa que es un carrusel, ya que está como en seis hospitales”.
Sobre el incremento salarial el gerente, Leonardo Morales, había ofrecido el uno por ciento pero los trabajadores piden el 10%. Además, exigen una investigación sobre una obra de ampliación que lleva dos años y medio parada. “Esto está ocasionando plagas, las ratas la invadieron, esto no puede pasar en un hospital”.
El hospital Meissen es una Empresa Social del Estado que cuenta con cien funcionarios de planta y 1.150 con prestación de servicios; muchos de ellos están hace 23 años sin haber sido nombrados. “Allí dan contratos por 20 días, luego adicionan 10 para completar el mes, pero nunca dan por tres meses”.
La entidad debe atender a la población de Ciudad Bolívar, localidad con presencia de 250 empresas, 80 colegios, 30 jardines y cinco zonas de bares; por lo que, según Fany Cárdenas, se hace necesario que tenga una cobertura más alta.
El sindicato decidió llevar a una mesa de negociación los puntos incumplidos por el burgomaestre, pero allí les dijeron que esos temas no hacían parte de ese escenario, que no tenían por qué llegar a acuerdos de salarios para contratistas.
“En julio de 2014 se reglamentó la estructuración de las plantas de empleo de carácter temporal y los acuerdos de formalización laboral en las empresas sociales del Estado del orden nacional y territorial, es decir, dieron vía libre para que las juntas directivas ajustaran las plantas temporales por un año. Aun así, no lo hacen”, argumenta la presidenta de Sintrameissen.
La corrupción y las malas administraciones son otros problemas que señala el sindicato: “La pasada fue del doctor Lizcano, que duraba tres meses sin pagar salarios, los empleados sufrían calamidades, no tenían salud ni pensión, las madres no tenían licencia de maternidad ya que no pagaban salud”.
“El gerente actual nunca ha pasado la calificación. La primera porque el hospital había quedado en malas condiciones, que no había laborado todo el año entonces se le perdonó; la segunda la perdió. Pasó el examen, pero no sabe gerenciar. El director científico no tiene ni idea cómo se gerencia, él dice: ‘baje un médico de consulta a urgencias cuando lo necesiten’, en ningún hospital se pueden confundir ese tipo de cosas. El jefe de talento humano persigue a la gente, hay liquidaciones mal hechas, si alguien va a consultar algo le dice: ‘recuerde que usted es de contrato’, hay un acoso laboral impresionante”.
