Wilfrido Jiménez Díaz
Carlos Alberto Valderrama Palacios, conocido cariñosamente por los colombianos y por la comunidad internacional amante del buen fútbol como el ‘Pibe’ Valderrama, no deja de deleitarnos con sus exquisitas jugadas.
Sí, es cierto, el hijo de ‘Jaricho’ ya no nos sorprende con su excelente técnica futbolística, su gran visión de juego y sus pases milimétricos que tanto nos extasiaron en su momento, no obstante de ser la máxima figura de la generación más brillante de futbolistas colombianos que se destacó desde mediados de los años 1980 a mediados de los años 1990, y de ser considerado uno de los máximos exponentes en la historia del fútbol colombiano, de América, e incluso del mundo, que fue distinguido en dos ocasiones como el mejor jugador de Sudamérica.
El pechiche de la cancha La Castellana del barrio Pescaito en Santa Marta, como el número diez que fue siempre, ahora nos hace sentir orgullosos de sus contundentes pasegoles a favor de la verdad, la justicia y la paz.
A pocos días del fallecimiento del comandante Hugo Chávez, instigó irónicamente a la prensa amarillista de nuestro país con sus trinos por Twitter, defendiendo la simpatía y el amor que éste despertó en el pueblo venezolano y el legado que dejó para su patria querida y América Latina en general.
Antes de la marcha del 9 de abril, a realizarse en Bogotá, invitó al pueblo colombiano a participar masivamente de este evento, con un llamado bastante contundente: “Nos merecemos la paz, este es el momento, yo creo que los diálogos han dado un paso importante y ahora nos toca a nosotros, los que queremos la paz de verdad”; y como cualquier conocedor de la realidad histórica de nuestro país, puntualizó: “Los colombianos buenos somos más que los malos, entonces este es un momento importante para demostrar eso, nosotros somos mayoría, somos más calidad, gente buena y estamos buscando la paz por medio del diálogo para que no haya más guerra en nuestro país”.
Y en plena marcha, al ser abordado por los periodistas, con un toque especial, gambeteó a los enemigos de la paz y puso un pase al pueblo colombiano: “Es el momento de dar la paz a todos estos colombianos que estamos marchando. No estamos marchando solamente por caminar, sino buscando un objetivo, que es la paz para nuestro país y para nuestras generaciones”.
Por esa actitud, querido ‘Pibe’, ¡todo bien, todo bien!
