Alrededor de 33 millones de colombianos están habilitados para elegir mañana a los legisladores que serán parte del denominado «Congreso de la Paz», en los comicios que abren un intenso periodo electoral, de cara a las presidenciales en mayo y el referendo revocatorio contra el alcalde de Bogotá, en abril.
Las elecciones del domingo serán clave para el futuro del país porque se elegirá a los legisladores que apoyen o no los acuerdos alcanzados por el gobierno en la mesa de negociaciones de paz con las FARC y se debatirán proyectos vinculados a ese diálogo.
Es por eso que la campaña se centró entre los partidarios y contrarios de seguir con el proceso de diálogo que se realiza en desde 2012 y en el que ya se logró acuerdo en dos de los cinco puntos de la agenda: desarrollo agrario y participación política.
El mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, que ya inscribió su candidatura a la reelección en las presidenciales que celebrarán el 25 de mayo por el Partido Social de Unidad Nacional (U), en estas legislativas contará con el apoyo del Partido Liberal (PL) y de Cambio Radical (CR).
El presidente gobernó hasta ahora respaldado con un bloque de 188 bancas de las 268 que tiene el Congreso, pero entonces contó con el respaldo de esta misma coalición más el apoyo del Partido Conservador (PC) que hace unas semanas decidió no respaldar a Santos en las legislativas e ir por la presidencia con la candidata propia Marta Lucía Ramírez.
Aún así, según las últimas encuestas, los tres partidos, -la U, el Liberal y Cambio Radical- reunirían la mayoría en el Senado, pero con un margen estrecho frente a las fuerzas críticas al proceso de La Habana, encabezadas por el Centro Democrático (CD) liderado por el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), que encabeza la lista de candidatos al senador.
Uribe, de 61 años, se tomó en serio su papel de candidato y fue el único que recorrió el país en búsquedas de votos, en una campaña marcada por polémicas y denuncias, acentuando el papel opositor a Santos, su delfín en la campaña pasada.
En septiembre, cuando presentó su plataforma para volver a la Cámara alta donde ya estuvo entre 1986 y 1994, Uribe justificó su decisión en que el país necesita recuperar «el rumbo de confianza», especialmente en materia de seguridad.
La figura de Uribe polarizó la política colombiana y se prevé que el expresidente obtenga un buen resultado el domingo cuya lista al Senado tiene el 23,4 por ciento de las preferencias del electorado, más del doble del 10,4 por ciento registrado en enero pasado, según el sondeo de febrero de la firma Datexco, publicado por el diario El Tiempo y La W Radio.
En tanto, la izquierda ubica un lugar marginado en las encuestas tras años de ser perseguida por la ultraderecha: le dan media docena de legisladores al Polo Democrático Alternativo (PDA), mientras que ninguno de los candidatos de la Unión Patriótica (UP), en la lista de la centrista Alianza Verde, tiene asegurada una banca.
Además de las legislativas, este domingo también se celebran las elecciones al Parlamento Andino, que despiertan poco interés entre los electores.
Según la autoridad electoral votará un total de 32.795.962 colombianos para renovar el Senado de 102 miembros, los 166 titulares de la Cámara de Representantes (Diputados) y los cinco delegados del país al Parlamento Andino.
Para el Senado se inscribieron 773 candidatos, para la Cámara 1.528 y para el Parlamento Andino lo hicieron 23; un total de 2.324 aspirantes, según la información oficial que citaron las agencias EFE, DPA y Ansa.
La Justicia Electoral imprimió 102,6 millones de boletas que serán distribuidas en los 32 departamentos colombianos y para los 561.247 electores inscritos en el exterior.
También se votará la consulta que definirá el candidato presidencial de la Alianza Verde entre Camilo Romero, John Sudarsky y Enrique Peñalosa.
Con el candidato verde en escena ya estará la grilla de aspirantes a la Presidencia, con Santos como favorito, seguido por Óscar Iván Zuluaga (CD), Clara López (PDA), Aída Avella (UP), y Marta Lucía Ramírez (PC).
La gran sorpresa de estos comicios la puede dar el voto en blanco que lidera en las encuestas entre el 30 y el 40 por ciento y amaga con una crisis que lleve a repetir las elecciones con nuevos candidatos si ninguno alcanza la mitad más uno de los sufragios, de acuerdo con la Ley de Reforma Política.
El maratón electoral lo completa el referendo revocatorio contra el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, convocado para el próximo 6 de abril, pero que podría anularse si el alcalde es destituido antes de esa fecha por un proceso administrativo paralelo que enfrenta por una supuesta mala gestión.
Por el momento la campaña es una de las más tranquilas que se recuerda en Colombia, acostumbrada a la violencia del conflicto armado y a los ataques contra los candidatos.
El peor episodio se registró hace unas semanas en el departamento de Arauca (noreste) cuando los custodios de Aída Avella se enfrentaron con miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN), un hecho por el que la guerrilla comunista pidió disculpas a la candidata.
