Johanna Lizeth Perdomo Losada
Hacia las cinco de la mañana en la vía que conduce a los municipios de Algeciras y Campoalegre, en el cruce entre estos dos departamentos, se registraron taponamientos por parte de aproximadamente 3000 campesinos, quienes fueron atacados por el ESMAD, hiriendo con gases a una madre con cuatro hijos menores de edad, en el que el mayor tiene nueve años de edad y el menor tiene cuatro. Otras tres personas resultaron heridas: uno por bala de fusil, otro sufrió heridas en el mentón, donde perdió dos dientes, el cual aún se desconoce si es por bala de fusil y uno último que resultó descalabrado.
El Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, CPDH Huila, denuncia la irregularidad con la que la Fuerza Policial hace control de la protesta, ya que está usando armas de fuego, en una manifestación en la que los campesinos utilizan solamente herramientas que les da la naturaleza.
Balance del Paro Nacional Agrario
Presa, detenida y hostigada, por la Policía Nacional, se ha visto la movilización de los más de cinco mil campesinos divididos en los diferentes puntos de encuentro en el departamento del Huila desde el pasado 18 de agosto.
Debido a las actitudes de represión y de violación a los derechos humanos, por las fuerzas policiales, particularmente a la norma constitucional de la libre locomoción, como lo dictan en la sentencia C -742/ 12 como dicta la Corte Constitucional «La protesta social tiene como función democrática llamar la atención a las autoridades y de la opinión pública sobre una problemática específica y sobre las necesidades que ciertos sectores…» y como lo emana la Constitución Política de Colombia en el artículo 37 «Toda parte del pueblo puede reunirse y manifestarse pública y pacíficamente», los campesinos no han podido llegar a los puntos de encuentro debido a los falsos argumentos de la policía.
En los puntos de concentración al nororiente del Huila, específicamente los municipios de Baraya y Tello, y al oriente de Neiva en corregimientos de Vegalarga y Ceibas se encuentran ubicados en el kilometro siete en la zona conocida como «La quesera», unos 400 campesinos, retenidos por el Mayor Jorge Ibarra, quien dijo que tenía órdenes del Coronel Juan Francisco Peláez, y del Brigadier General Omar Rubiano Castro, de no dejar pasar absolutamente a nadie.
Igualmente, al sur del Huila, campesinos provenientes del Caquetá y Algeciras, ubicados a unos tres kilometros del casco urbano del municipio en el sitio conocido como «La pollera», se encuentran asentados 3500 campesinos, donde además en el día de ayer, fueron saboteados por agentes de la policía que manejaban un helicóptero, donde además arrojaron un una bomba incendiaria marca Violet Sloke 6210-V, provocando un incendio forestal exponiendo la integridad física de los marchantes.
Entre otras cosas, en el que se destaca el Huila como la región más restringida del Paro Nacional Agrario, en el municipio de La Plata, donde se desplazaban, ayer 300 campesinos y indígenas de la comunidad NASA, del resguardo de Potrerillos, miembros del Consejo Regional Indígena del Huila (CRIHU), sobre la vía que conduce al Terminal de Transporte, fueron inmovilizados varios vehículos escalera, en el que los miembros de la Policía los retuvieron de manera irregular tal cual como viene ocurriendo hace dos semanas antes del paro.
A este hecho se le suma la manipulación gubernamental en la que tanto el Alcalde de Neiva, Pedro Hernán Suárez y el Gobernador departamento, Carlos Mauricio Iriarte, argumentan a los medios de comunicación regional respetar la protesta, sin embargo las acciones son otras, hasta el punto que el secretario de gobierno municipal, José Ferney Ducuara, sostuvo que no permitirían más movilizaciones y marchas en la capital opita.
