El dibujante y director de la publicación Charlie Hebdo fue invitado en septiembre 2014 a la fiesta del periódico l’Humanité del Partido Comunista Francés en Toulouse para debatir sobre el partido derechista Frente Nacional. Entrevista.
Gilles-R. Souillés
—¿Por qué razón viene usted a la fiesta de l’Humanité de Toulouse?
—Tengo una verdadera cercanía con l’Humanité, primero porque desde hace mucho tiempo dibujo en la edición dominical de este periódico y también durante la semana, además comparto a las ideas que defiende l’Humanité, conozco bien a Roselyne de la librería la Renaissance, que hace un trabajo formidable. Respondí con mucho gusto a la invitación para debatir sobre todo sobre el Frente Nacional (partido de extrema derecha francés).
—¿El comunismo es aún un proyecto prometedor?
—Claro, por supuesto, yo sueño con la Unión Soviética de la Unión Europea, no bajo el modelo que fracasó en el Este, por supuesto. Pero creo que el comunismo es una solución a la crisis, no veo otra manera. A lo mejor me falta imaginación pero casi siempre he votado comunista. Casi me afilio al Partido Socialista (PS) cuando estaba en el liceo. Mi familia vota sobre todo PS.
—Charlie Hebdo se implicó bastante en el debate sobre las caricaturas de Mahoma. ¿Cómo analiza usted el fenómeno yihadista que vive Toulouse?
—Nadie niega el fenómeno de estos jóvenes que se van para hacer parte del Yihadismo, es una realidad, hay un verdadero peligro, pero yo creo que el riesgo es sobrevaluado, que ellos no son tan numerosos. Se hace mucha más bulla acerca de este peligro que sobre el número de asesinados con Kalachnikov en Marsella. No hay que tener más miedo que lo que la razón nos indica. Hay que poner cuidado a lo que se dice en los medios masivos de comunicación, pues si se insiste en decir que son muy poderosos, van a terminar siéndolo.
Los media pueden reforzar el fenómeno yihadista y reforzar en su determinación a individuos que antes estaban solos. Felizmente esta vez, no se hizo la amalgama entre los yihadistas y los musulmanes.
—¿Cómo ve usted el futuro de la prensa, especialmente la satírica?
—Es catastrófica, la crisis ayudó a aumentar los problemas que ya existían antes, no veo cómo los periódicos (en papel) puedan tener futuro, aun más ahora que la situación de la red de distribución se empeora. Paradójicamente, Charlie Hebdo y la prensa satírica en general estamos más protegidos, pertenecemos a un estrato donde hay poca competencia. Pero vivimos con dificultades, no hay dinero en reserva. Vamos a proponer una fórmula para internet, pero esto no compensará la caída del papel
—¿Un mensaje para esta fiesta?
—Sí, un mensaje de esperanza. Le digo a la gente que la protesta, la rabia, las críticas contra las élites son justificadas. El problema es cuando la gente vota FN en vez de PC. Lo que no comprendo es que tenemos el derecho de criticar la ideología y las políticas del FN (Frente Nacional) pero no sus electores. Ellos sufren sin duda, sienten descontento, estoy de acuerdo, pero para mí son unos cabrones. La característica del voto al Frente Nacional es que es ante todo un voto racista, antiinmigrante. Si no, ellos votarían a la izquierda
La Depeche
Traducción de Armando Orozco Tovar
